5 detenidos por asesinar a un colombiano de una puñalada y un golpe en la cabeza en un barrio conflictivo de Aranda

Cinco indiviudos han sido detenidos por su presunta implicación en la muerte violenta de un hombre, que ha fallecido hoy en una acera de la Avenida de Burgos en el conflictivo barrio de Santa Catalina de Aranda de Duero. La víctima era de origen colombiano y tenía 41 años y dos hijas. Su cuerpo ha sido encontrado por un vecino junto al portal número 2 de la citada calle.

Según la Policía Nacional en el momento del hallazgo estaba inconsciente, con una herida incisa en el cuello y la ropa manchada de sangre. Aunque los Servicios Sanitarios han acudido rápidamente al lugar, no han podido hacer nada por salvar su vida.

Según explican fuentes de la investigación, pese a que la víctima presentaba un corte en el cuello, hay que esperar a la autopsia para conocer la causa de la muerte ya que también sufrió un traumatismo craneoencefálico.  Del mismo modo, también se tomará declaración a los detenidos en las próximas horas para poder esclarecer las circunstancias concretas en las que se produjo esta muerte violenta.  

Primer detenido

Tras activar el protocolo policial para estos casos y después de las primeras actuaciones y toma de datos, agentes de la Comisaría de Aranda localizaban a un hombre de 58 años dentro del portal de la citada finca donde presuntamente se habría cometido la agresión. Tenía sus ropas manchadas de sangre. Según la Policía, reside en una de las viviendas de dicha finca y ha sido detenido por su presunta implicación en los hechos.

Momentos después, se ha procedido a la detención de otras cuatro personas, que se encontraban en la vivienda del primer detenido, a quienes se investiga también por estar relacionadas con este suceso. A este respecto, se comprobará quiénes viven en el piso donde se originó el enfrentamiento.

Según explican, en estos momentos se investiga el grado de participación de cada uno de los detenidos centrándose los agentes encargados del caso en determinar con precisión las circunstancias ocurridas, y establecer tanto la causa de la muerte como el móvil o motivación del mismo.

Los cinco detenidos se encuentran ingresados en los calabozos de la Comisaría de la Policía Nacional de Aranda, a la espera del avance de las investigaciones y la determinación de responsabilidades penales, y pasarán a disposición judicial en los plazos legales previstos.

En el barrio de Santa Catalina, los vecinos no esconden su preocupación. “En los medios se habla mucho de la calle Pizarro y Hospicio, pero desde Hospicio hasta la Avenida de Burgos es lo peor. Aquí sufrimos de todo: robos, peleas, agresiones sexuales… Falta policía y falta orden”, apremia una vecina.

Lo cierto es que, en esa zona, las peleas son continuas. Algunas incluso llegan a ser multitudinarias, como la del 28 de agosto, cuando treinta personas se vieron implicadas en una reyerta en la calle Pizarro, que se saldó con dos detenidos y una persona herida que fue ingresada en el hospital.

El enfrentamiento comenzó, al parecer, por una disputa entre un matrimonio y dos hermanos, todos de origen magrebí. La tensión fue yendo a más, y a cada una de las partes se sumaron familiares y amigos. El motivo de la trifulca se desconoce, aunque, según fuentes policiales, ambas partes se conocían de antes.

Segunda muerte violenta en el año

En gravedad, sin embargo, esta es la segunda muerte violenta en Aranda en lo que va de año. El pasado mes de octubre, un hombre mató presuntamente a su suegro en una vivienda de la calle Benjamín Palencia.

Los hechos tuvieron lugar el 4 de octubre, cuando la víctima, Valentín López Saiz, acudió al domicilio que el presunto agresor compartía con su hija antes de la separación en el barrio del polígono residencial. Al ver que no regresaba a casa, la viuda llamó a la Policía, que, tras buscar sin éxito por el barrio, acudió con la hija al piso. Al abrir la puerta, se descubrió la tragedia: el cadáver del hombre yacía con evidentes signos de violencia.

Comenzaba así una búsqueda exhaustiva del prófugo, que fue localizado 24 horas después en la localidad de Carabias, en la provincia de Segovia. El acusado intentó evadir la detención embistiendo al vehículo policial con su coche, provocando heridas leves a tres agentes. A continuación, huyó a pie hasta que fue reducido por los agentes con una pistola ‘taser’.

Valentín era un hombre querido y muy conocido, sobre todo en Zuzones y La Vid y Barrios, donde fue concejal del PP entre los años 2015 y 2023. Tenía 72 años. En ese caso, se dio la circunstancia de que la hija de la víctima, y exmujer del presunto homicida, había presentado esa misma mañana una denuncia contra él por violencia de género.

Intento de homicidio

Más suerte tuvo la vecina de 56 años que sobrevivió al atropello en la calle Pío Baroja, muy cerca de la pelea mortal de ayer. En ese caso, su exmarido, que se dio a la fuga, ingresó en prisión provisional y se enfrenta a un delito de intento de homicidio.

Los hechos se desarrollaron el 17 de octubre. La mujer fue trasladada de urgencia al Hospital Universitario de Burgos, donde ingresó en la UCI en estado grave, aunque su vida no corría peligro. El agresor acumulaba varias denuncias por violencia de género por parte de su expareja, según las fuentes consultadas por este periódico.