La crisis láctea divide al campo

La brecha entre Asaja y la Alianza ya estaba abierta, aunque, sin lugar a dudas, la ‘Marcha Blanca’ en defensa del sector lácteo ha reabierto las heridas.El presidente de Asaja en Castilla y León, Donaciano Dujo, justificó su ausencia del Consejo Regional Agrario y puso de manifiesto que «en el tema lácteo, no nos vamos a sentar a negociar con UPA-COAG». Una organización que, dice, se ha dedicado, una y otra vez, a «boicotear» los esfuerzos realizados en la marcha de la leche a Madrid. Hay que apuntar que la Alianza se desmarcó finalmente de este acto reivindicativo, aunque dió libertad a sus afiliados para participar.Así, Dujo reclamó este lunes «responsabilidad» a la Alianza y le pidió que «recapacite» en su actitud de «continua crítica, insultos y descalificaciones» a los responsables de la organización .«El sector agrícola y ganadero necesita unidad y este no es el estilo», señaló.Interrogado sobre si estas discrepancias suponen que Asaja no volverá al Consejo Regional, el máximo responsable de la organización afirma que eso es algo que «iremos viendo». Si las cosas no cambian, afirma, la interlocución con Agricultura estará en peligro y pedirán a la consejera, Milagros Marcos, que se establezca un diálogo bilateral.Antes de que esto ocurra, abogan por volver a la «normalidad» sindical y, por eso, esperan que la queja pública expresada este lunes con su ausencia del Consejo Agrario, haga recapacitar a la Alianza en su «estilo». «Espero que la Alianza deje el ámbito de la batalla y cada uno, con sus discrepancias, se dedique a lo suyo».Por su parte, uno de los coordinadores de la Alianza, Aurelio Pérez, restó ayer importancia a la no presencia de Asaja en el órgano colegiado, y aseguró que «no entendía el pecado», en relación a las críticas expresadas por Asaja.De forma irónica, eso sí, Pérez señaló:« Pido perdón y que me pongan una penitencia. Yo por el bien del sector hago lo que sea».La postura de Asaja no fue objeto de debate en el Consejo Regional Agrario ya que, como explicó la consejera, Milagros Marcos, «no hay que desviarse de lo que verdaderamente nos preocupa».

En este sentido, tanto la Alianza como la Junta evitaron valorar esta situación que se enmarca, según Marcos, en un ámbito «puntual y personal».Desde Asaja, por su parte, se insiste en que el sector debe luchar ante la industria y la distribución, «cada uno con su forma de actuar, pero sin guerras».