Nueva línea de apoyo financiero a las empresas para ganar tamaño

La Consejería de Economía y Hacienda reforzará a partir del próximo año los instrumentos de apoyo financiero a las empresas que apuesten por ser más grandes, más innovadoras y más internacionales.Habilitará un «nuevo instrumento» de acompañamiento a «planes plurianuales de expansión y crecimiento», que atenderá de forma «integrada» necesidades de «capital, circulante, financiación de inversiones y cofinanciación».Para incentivar la innovación, pondrá el foco tanto en empresas en activo como en las emergentes. Para las primeras, creará una línea de préstamos participativos que inyecten fondos «sin mermar la capacidad de financiación ajena» y «cheques de innovación y para TIC [tecnologías de la información y la comunicación]» a modo de ayudas para servicios técnicos.A las ayudas genéricas para la puesta en marcha de nuevos negocios, se sumará una línea de «préstamos ventajosos» para empresas incipientes de base tecnológica y otros instrumentos basados en la «bonificación de créditos o flexibilización de garantías» si se instalan en los pueblos.

El Plan Director de Promoción Industrial, previsto en la Ley de Industria, que ya revisa el Diálogo Social y que será aprobado en el primer trimestre de 2016 para su debate posterior en las Cortes, pone el acento en articular instrumentos financieros que permitan multiplicar la competitividad del tejido productivo de Castilla y León.Ése será el medio para lograr el fin: que la industria manufacturera –aquella que se encarga de los procesos de producción con destino directo al consumidor–, alcance en cinco años un peso equivalente al 20% del Valor Añadido Bruto (VAB).El objetivo, que implica incrementar en 3,9 puntos la dimensión del sector industrial sobre la economía regional de aquí a 2020, constituye un compromiso electoral del PP y es materia del acuerdo político que sellaron el 22 de julio el jefe del Ejecutivo autonómico, Juan Vicente Herrera, con los portavoces de los grupos parlamentarios Popular, Socialista, Podemos y Ciudadanos.El documento, de casi 200 páginas, parte de un diagnóstico del sector en la Comunidad, con sus debilidades y fortalezas; articula medidas en seis ‘ejes de competitividad’; e identifica hasta siete subsectores «prioritarios» de actuación.Uno de esos ejes está dedicado a la financiación, «fundamental» para que las sociedades «puedan invertir, innovar y crecer». Los técnicos constatan que el apalancamiento aún elevado en comparación con la zona euro que arrastran las empresas, unido a las restricciones del crédito y sus condiciones poco ventajosas hacen necesaria una intervención pública que «resuelva los fallos de mercado» y ejerza un «efecto palanca» para «multiplicar los recursos y compartir riesgos».De ahí que el Plan de Promoción Industrial explore múltiples vías de financiación: el ICO y CDTI entre los organismos nacionales; el Banco Europeo de Inversiones, el del Consejo de Europa o los Fondos Feder entre los internacionales; el Consejo Financiero de Castilla y León; o sociedades de garantía recíproca como Iberaval. Al respecto, el documento especifica que se articularán «nuevos fondos de capital riesgo para financiar proyectos innovadores y de capital semilla para el arranque de empresas innovadoras».Además del auxilio financiero, en la mano de las administraciones está la posibilidad de configurar un entorno atractivo para la inversión empresarial por la vía de la regulación o la dotación de infraestructuras.Así, Economía propone habilitar subvenciones para incentivar el uso empresarial de las energías renovables;y plantea «nuevas fórmulas atractivas de comercialización del suelo» en los parques empresariales y tecnológicos a través de «cesiones de tipo concesional con opción de compra a medio plazo.En el área de internacionalización, la Junta plantea más promoción y la atracción de inversión extranjera. Estas son las principales novedades de un Plan de Promoción Industrial, que recopila muchas medidas diseminadas en otras estrategias y programas de la Consejería.