«Profundizar en la Guerra Civil ha sido una apuesta seria y reflexiva»

L. B. / Burgos

Dispuestos a hablar de lo que otros no quieren. Dispuestos a reabrir heridas gangrenadas. Dispuestos a ser voz de los silenciados, de aquellas gentes sencillas que sufrieron. Así regresan los Barricada. Suman 21 discos desde 1982, cuando la banda tocaba por primera vez en el barrio pamplonés de Txantrea, su barrio. Llegan con un libro disco sobre la Guerra Civil, dedicado a la memoria de las víctimas, que desmenuzan en 18 temas y testimonios escritos como aderezo. Lo presentan en Burgos, en El Hangar, el próximo sábado, dispuestos también a demostrar que siguen en plena forma. Las entradas para disfrutar con la voz de Enrique Villarreal 'El Drogas', la batería de Ibon Sarnaga y las guitarras de Alfredo Piedrafita y Javier Hernández 'Boni' están agotadas. Éste último se animaba a detallar -vía correo electrónico- las claves del último proyecto y de la larga trayectoria del grupo.

Pregunta.-¿Cómo surgió la idea de La tierra está sorda?

Respuesta.-Hace algo más de tres años, con la lectura del libro La voz dormida de Dulce Chacón, que narra y da voz a un grupo de mujeres encarceladas en la prisión madrileña de Las Ventas. A partir de ahí, 'El Drogas' se zambulló en libros y documentación sobre la Guerra Civil. No faltó trabajo de campo, presenció aperturas de fosas comunes y conversó con testigos directos. Obtuvo valiosísima información para este trabajo. Y no menos laboriosa fue la parte musical. Tal como se perfilaban las letras debía estar a la altura para rematar un proyecto que se intuía con peso.

P.-Si el primer disco fue definido por la banda como «el carajillo hecho disco», este último sería...

R.-La emotividad hecha libro-disco, salpicada de rabia e impotencia.

P.-Se habla de La tierra está sorda como el trabajo más social y conceptual de Barricada...

R.-El más conceptual, sin duda. Y social, quizá porque puede ser más que un pellizco que haga caer en la cuenta de la ignorancia que existe en torno a la Guerra Civil.

P.-¿Qué aporta este nuevo trabajo a la dilatada trayectoria del grupo?

R.-Ha sido una apuesta seria y reflexiva. Es un trabajo hecho con madurez frente a ese agujero negro que fue la dictadura de Franco y compañía. Musicalmente, optamos por un aporte sin complejos que nos ha hecho disfrutar.

P.-La Guerra Civil es un tema peliagudo. ¿Ha sido fácil esquivar el rencor o el dolor al hablar de represión, injusticia o asesinatos?

R.-Bastante peliagudo. Siempre es difícil abordar las heridas abiertas que dejó el conflicto. Se han pasado por alto como si fuera algo que había que olvidar, pero el efecto ha sido el contrario. Sólo conocer bien lo que se vivió servirá para poner en su sitio rencores y dolor.

P.-La Guerra Civil ha sido inspiracoón recurrente en el cine o en la literatura. ¿Faltaba la música o el rock en particular?

R.-Bueno, de una u otra manera el rock ha hecho antes referencias a la Guerra Civil -Berri Txarrak o Loquillo, por ejemplo- aunque quizá no con tanta profundidad.

P.-¿Qué han aprendido sobre el conflicto o sus consecuencias?

R.-Sobre la Guerra Civil siempre se han contado y se cuentan hechos puntuales. Al profundizar, descubres que, tras una guerra que enfrenta a ciudadanos de un mismo país y en la que hay una parte totalitaria que quiere dominar a un pueblo porque sí, hay personajes y gente sencilla que lo daba todo. Y la mujer jugó un papel fundamental en aquellos tiempos difíciles, dentro y fuera de casa.

P.-Hasta el momento, ¿cómo habéis percibido la reacción de vuestros seguidores a esta propuesta tan especial?

R.-Pensábamos que al personal le costaría un poco entrar, pero ha sido todo lo contrario. La respuesta ha sido muy buena y nos ha acercado a otros públicos.

P.-¿Queda aún qué contar o cantar de esta época?

R.-Tantas cosas como personas que sufrieron en sus carnes los avatares de una guerra injusta. Cada individuo represaliado tendría algo tremendo que contar, como para hacer una canción, un disco o una novela.

P.-¿Alguna canción, estribillo o frase del disco resume su esencia?

R.-El título del disco es muy definitorio, pero si hubiera que elegir sería Por la libertad, que era precisamente la razón de muchos actos, el lema que la gente tenía en la cabeza.

P.-Las entradas para el concierto en Burgos se agotaron hace semanas. ¿Cuál es el secreto para llenar tras casi tres décadas de vida?

R.-Ir donde te quieran y mantener las ganas de subirte a un escenario

P.-Estancarse suele ser un riesgo que corren las bandas de largo recorrido. ¿Es posible evitarlo con más de veinte discos a las espaldas?

R.-El estancamiento en un grupo es como una página en blanco para un escritor. De ese limbo intenta huir cualquier persona creativa, es un aspecto que siempre se intenta cuidar. Y si hay alguna fórmula, ésa es sin duda el trabajo.

P.-¿Qué ha ganado y qué ha perdido Barricada desde 1982?

R.-Ha ganado, lógicamente, experiencia, necesaria en este mundillo, y capacidad de no acordarse de lo perdido porque perdido está, con excepción de los compañeros que se han quedado en el camino.

P.-Como expertos en la materia, ¿qué opinan de la evolución y situación actual del rock en España?

R.-Es más fácil funcionar para los grupos que tienen cierto nombre y aún así hay un montón de dificultades. Mientras no se trate a esta forma de expresión con interés y respeto, seguirá siendo un mero títere.

P.-¿Es verdad que tras la gira llegará un periodo de descanso indefinido? ¿Cómo de indefinido? ¿Se vislumbra el final del camino?

R.-Sí, al acabar la gira tomaremos un descanso puesto que desde 2003 no hemos parado y hemos pensado que sería buen momento. La duración está por ver.