«En el siglo XX las mujeres dejamos de ser una nota a pie de página»

A.S.R. / Burgos

Pasan unos minutos de las once y media de la mañana, apenas se han desperezado los libreros y ya ha llegado la primera lectora de Julia Navarro. Laura Díez espera ilusionada y sin impacientarse la firma de la autora de Dime quién soy. Al mismo ritmo que pasan los minutos llegan nuevos seguidores con ejemplares debajo del brazo. Unos con ediciones de bolsillo de La Hermandad de la Sábana Santa y La Biblia de barro, otros con La sangre de los inocentes y la mayoría con el último éxito de la periodista, Dime quién soy. Goteo constante.

Julia Navarro es ya una vieja conocida del público burgalés y de las pocas que consigue que sus lectores formen, y no rompan, filas ante ella en la Feria del Libro. Está de gira con su último título y no podía faltar una parada en la capital del Arlanzón. «Aquí tengo muchísimos seguidores y siempre han sido muy cariñosos conmigo», dice agradecida a un público que, a pesar de «esta situación de crisis tan grave», sigue convirtiendo en superventas sus textos.

Once semanas en el podio de los más vendidos lleva Dime quién soy. Navarro ha vuelto a acertar con la vida de Amelia Garayoa y el afán de Guillermo por averiguar la historia de una bisabuela que siempre ha sido un misterio en su familia. Su vida es la de una superviviente, actriz principal o secundaria en la Guerra Civil española y la posguerra, en la Segunda Guerra Mundial, en la Rusia estalinista, en los años de la Guerra Fría...

Pero no es una heroína. «Es una mujer de su tiempo, que nace en 1917, que empieza a ser una mujer con la caída de la Segunda República, que tiene una vida llena de altibajos, compleja, contradictoria y que refleja un poco la evolución de las mujeres el siglo pasado. El siglo XX es el de las mujeres, en el que empezamos a dejar de ser una nota a pie de página para convertirnos en ciudadanas», comenta la autora, quien habla de Dime quién soy como «una novela contra los totalitarismos, contra el estalinismo, contra el fascismo y, sobre todo, contra la peor cara de éste como es el nazismo».

La periodista no deja títere con cabeza. Arremete contra Hitler, pero también contra Mussolini y contra Franco, deja en evidencia la ambigüedad de Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial, denuncia el abandono de la Segunda República por parte de las potencias europeas...

Estos acontecimientos son la escenografía de esta historia. Su confección ha sido más sencilla -dice Julia Navarro- que en anteriores obras. «La novela comienza con la caída de la Segunda República y termina con la caída del Muro de Berlín y todo esto ha sucedido anteayer y todos tenemos una memoria de lo acaecido», ilustra la autora, que confiesa haberse hartado a ver batallas de la Segunda Guerra Mundial. Pero es sólo para ambientar porque, reitera, que sus novelas siempre son actuales, alumbradas por «temas que me preocupan como periodista y ciudadana».

El público sigue llegando. María le regaló el libro a su madre y ayer las dos esperaban su momento para rubricarlo. La autora firma, firma, y firma, y sonríe cuando alguien le echa la mano al hombro para hacerse una fotografía. El día se prevé largo.