De lunas, corazones, hadas, nanas, Callas y otros cuentos

A.S.R. / Burgos

Las secciones para niños de las bibliotecas o de las librerías se abren como mundos imposibles de dragones que cantan, de corazones que se rompen y se recomponen, de duendes juguetones amigos de la luna, de sopranos que provocan escalofríos, de cuentos de terror en un universo rosa... Los libros infantiles y juveniles también copan los sacos de Reyes Magos, Papá Noel y demás. Y como cada vez son más los volúmenes para estas edades que ocupan las estanterías, la Biblioteca Pública (calle Valladolid, 3) incluye una guía práctica en el último número de su revista BiB, de distribución gratuita en el centro, unos consejos convertidos en sección permanente que se vuelven más útiles en estas fiestas navideñas.

La publicación articula sus recomendaciones en cinco tramos. Comienza con los prelectores, los de 0 a 5 años, a los que muestra seis títulos, algunos muy ilustrativos y didácticos como ¡Tengo pipi! y otros con mucho humor, Me comería un niño. Sigue poniendo su mirada en los pequeños de 6 a 8 años. Ahí aparece una autora burgalesa, María Jesús Jabato y su Tan alto como la luna, o la tierna historia que ocurre en el Taller de corazones, de Arturo Abad, sin olvidar el punto nostálgico de Las nanas de Miguel, de Javier Sobrino. La cosa se pone más seria al tiempo que se cumplen años. La Callas. Una invitación a la ópera, de Françoise de Guibert, o Cómo fracasé en la vida, de Bertrand Santini, que se regodea en lo bien que van las cosas hasta que se crece, son las recomendaciones para los niños de 9 a 11 años.

Cinco volúmenes se insinúan a los jóvenes de 12 a 16 años, de La noche estrellada, de Jimmy Liao, a Mujer mirando al mar, de Ricardo Gómez. Se cierra esta mano a sus Majestades con cuatro cómic, entre ellos, María y yo, de Miguel Gallardo, sobre la relación de un padre y su hija autista.

Club y taller de dibujo

No es esta revista la única herramienta de la Biblioteca Pública con los más pequeños. Comenzará el curso con fuerza. Su club de lectura familiar se desdoblará en dos grupos, uno con los prelectores, de 6 y 7 años, y otro con los de 8 y 9 años. Su directora, la cuentacuentos Margarito, considera esencial esta partición, «por mucha pena que haya dado a los niños», porque los ritmos de lectura son distintos. La inscripción está abierta hasta el 20 de enero. Las letras se completarán en este nuevo año con los dibujos. La Niña Vero impartirá un taller de ilustración de cuentos los días 15 de enero y 12 de febrero para los niños de 5 a 15 años y continuará a lo largo de 2011.