Entreculturas elige el sonido mediterráneo de Asikides para su concierto solidario
El grupo asentado en Barcelona y con músicos de distintos países llega el día 26
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A.S.R. / Burgos
El cálido Mediterráneo se adentrará en la fría capital burgalesa el sábado 26 de marzo con el ya clásico concierto de Entreculturas (Salón Cajacírculo de la calle Concepción, 19.30 horas). El ritmo salado del mar llegará en el equipaje de Asikides, banda multicultural asentada en Barcelona compuesta por músicos griegos en su mayoría, pero también de otros países alumbrados por los atardeceres rojos a los que cantó Serrat, que desde 2009 se completa con la voz de la israelí Tal Ben Ari.
De este mano a mano ha nacido Hesperia, el último trabajo de Asikides, publicado el pasado mes de enero. Las canciones que lo componen recuerdan el viaje mitológico de Hércules hacia el Atlas marroquí, donde quizás se escondiera el jardín de las manzanas de oro que custodiaban las hespérides.
La multiculturalidad es una de las señas de distinción de este grupo creado en 2007 por Yannis Papaloannou, su director artístico además de voz, laúd, saz... La formación se completa con la ya citada Tal Ben Ari (voz y percusiones), Franco Molinari (contrabajo), Ernesto Briceño (violín y teclados), Lisandro Silva (guitarras) y Alberto Pérez (percusiones).
Este concierto hace el número ocho de los organizados por Entreculturas y el balance no puede ser mejor. «Estamos encantados. La respuesta de la gente es magnífica y siempre se queda gente fuera», dice el voluntario Jaime Burgos.
Las entradas cuestan 6 euros y ya están a la venta en Hora de Viajar (Antonio de Cabezón, 6), librería Espolón (Paseo del Espolón, 30) y los bares Carmen 13 (en esta dirección) y Carabás (Carmen, 2). Y como es habitual se abre una fila cero en el número de cuenta 2017 0091 53 0000238394 de Cajacírculo.
La recaudación se destinará a culminar una escuela primaria en Burundi, proyecto que también recibió los fondos conseguidos en la última edición. «Normalmente estamos dos años con cada proyecto porque suelen ser de una envergadura importante», explica el integrante de esta ONG que cree ciegamente en que la educación es la puerta que abre el desarrollo de los pueblos.