Alrededor de 30.000 personas disfrutan del Enclave de Calle 2011

MARTA CASADO / Burgos

Satisfacción en los organizadores del Enclave de Calle 2011 por los resultados alcanzados durante el pasado fin de semana. El teatro de calle, los títeres, la danza y el mudo de la magia, los sueños y el color han encandilado a cerca de 30.000 personas desde el viernes 9 al domingo 11 de septiembre. «Han sido unos resultados más que satisfactorios, sin desmerecer la programación desde luego, han tenido mucho público gracias al buen tiempo que hemos tenido estos días porque el teatro de calle gusta al público burgalés», afirma el responsable político de festejos y del festival, José Antonio Antón Quirce, quien remarca que «los espectáculo de taquilla han vendido el 100% de las entradas».

Los 25 espectáculos programados, procedentes de distintos puntos de Europa y España, han contado con llenos en todos los puntos del Enclave repartidos por la ciudad ya sean las 7.000 entradas a representaciones con taquilla mientras que se estiman unos 20.000 espectadores en los espectáculos de asistencia libre. Las representaciones que se han desarrollado en la Plaza de la Libertad han reunido a 2.500 personas durante el fin de semana. Más de 530 espectadores han disfrutado de Carloneon y otros 600 han visto Capsés, ambos instalados en el Paseo de Marceliano Santa María. Hasta el Paseo de Atapuerca se han acercado 522 personas para presenciar el espectáculo de Karroart mientras que otros 200 han disfrutado del Teatro de Autómatas. En el Monasterio de San Juan un total de 740 burgaleses han participado en las propuestas escénicas de Onírica Mecánica y Cie. L'Deuf Mecaniqué. Un espectáculo con entrada, el Circo Aéreo desplegado en el Parque de El Parral contó con 590 personas.

Y mientras se hace balance de resultados también se desgrana una «hoja de ruta con la que queremos mejorar y ampliar el Enclave de Calle para el próximo año en definitiva potenciarlo. No sabemos si todas estas ideas se van a poder desarrollar pero lo vamos a intentar», concluye Antón. Entre los retos figura la ampliación al jueves de la programación general «con la posibilidad de incorporar teatro escolar» avanza. También se trabaja en redefinir los espacios dedicando una plaza o espacio específico a presentar nuevos espectáculos producidos y hechos en Burgos. «Es una manera de potenciar las producciones locales y vincularla a otra iniciativa como la creación de la Feria de Programadores para que las compañías de Burgos puedan mostrar a concejales y técnicos de otras provincias los espectáculos que organizan y facilitar su contratación», afirma. La Feria de Programadores se estudia que pueda contar con un calendario y espacio propio con programación específica y conocer los espectáculos del Enclave para estudiar su posible contratación.

Además de dedicar un espacio propio a los grupos burgaleses también se plantea crear un Enclave Solidario. «Se trata de poner en marcha una sección dentro del festival que permita acercar los espectáculos del Enclave a los hospitales o residencias de ancianos», avanza Antón. Quien recuerda la idea de crear una segunda sección no profesional para grupos que están empezando, «se trataría de organizar un concurso en el que el ganador sería, después, contratado para participar en actividades organizadas por el Ayuntamiento», concluye. Unas ideas claras que permiten, al menos, definir que el espectáculo de calle tendrá más continuidad y refuerzo en la proxima edición con la mirada puesta en que el cielo vuelva a acompañar para superar la cifra de los 30.000 espectadores.