Batallas de baile con contorsiones imposibles se citan en Burgos

MARTA CASADO / Burgos

Las contorsiones imposibles al ritmo de la música inundaron ayer el escenario del Centro de Creación Escénica La Parrala. Allí se concentraron hasta 25 grupos procedentes de provincias como Madrid, Barcelona, Cáceres, Sevilla, Bilbao, Navarra, Málaga, Asturias, Santander y las nueve provincias de Castilla y León además de los cuatro grupos de Burgos. El objetivo: competir por alzarse con el III Campeonato Nacional de Break Dance, organizado por la asociación sin ánimo de lucro Saltando Charcos. «Éste es el tercer año y la verdad que sin ayudas de ningún tipo lo hemos sacado adelante por los chavales que son los que nos piden que hagamos estas cosas y que nos animan a sacarlo todo adelante», asegura Óscar Caballero, miembro de Saltando Charcos. Confirma que este campeonato está alcanzando su hueco y tiene resonancia en Barcelona o Madrid, donde se mueve este tipo de agrupaciones de break dance. Respecto al concurso, que desbordó la participación esperada por la organización, asegura que no es un break dance descafeinado por las leyes de la coreografía clásica, «es el break dance que bailan los chavales en la calle, fuera del ámbito académico» aclara Caballero. Por ello hay presentes importantes agrupaciones. Asegura que con estas iniciativas el break dance emerge en Burgos pero «en cuanto los chavales alcanzan un nivel serio tienen que irse a Barcelona o a Madrid» por ello incide en la necesidad de «facilitar un espacio en el que los chavales de Burgos puedan participar en concursos, bailar y disfrutar» afirma. «Es una disciplina que requiere entrenamiento y es la cultura de estos chavales que dedican tiempo a practicar esta actividad mientras conseguimos que estén lejos de los problemas de la calle y esperamos que con el tiempo el Ayuntamiento tome conciencia de esto y nos ayude un poco», afirma.

Los grupos participantes se han enfrentado en Batallas 2x2. Y entre los ocho finalistas se ha celebrado una competición más extendida en Estados Unidos pero poco difundida en España y que se llama 7tosmoke que se basa en una lucha en la pista de los ocho grupos finalistas para elegir al mejor bailarín. La organización del acto ha contado con la participación de Javi, un chaval burgalés que se abre camino en este mundo en Barcelona y que ha acercado a Burgos a un Dj de Zaragoza y como speaker a Lunatics, uno de los mejores grupos a nivel nacional.