El Correo de Burgos

Los otros lenguajes modernos que entiende el violín

El Conservatorio de Música de Burgos acoge un curso intensivo de Violín Creativo. Es el tercer año que se organiza para alumnos y el primero para profesores

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Burgos

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MARTA CASADO / Burgos

La cuerda de un violín no sólo sirve para interpretar a Mozart. La unión de una viola, un contrabajo, un chelo y un violín no siempre tienen que formarse como una orquesta de cámara que interprete a Stravinsky. Los instrumentos de cuerda dan para mucho más aunque eso no se incluye en el programa educativo. Por ello desde hace tres años los profesores de violín del Conservatorio de Música de Burgos Luis Martínez y Cristina Valle organizan desde hace tres años cursos intensivos de violín creativo. «Es un lenguaje más el que adquieren los alumnos, porqué privarles de un aprendizaje añadido en otros estilos de formación que además se asemejan a los sonidos que ellos escuchan» apunta Luis Martínez. Este tipo de cursos intensos de un fin de semana son comunes en los conservatorios y en el de Burgos también. Éste nació con vocación de continuidad. El primer profesor fue Diego Galaz y desde hace dos años imparte las clases el profesor de la Escuela Superior de Música de Cataluña, Oriol Saña Campoy.

Este año el curso ha contado con la participación de una treintena de alumnos y, por primera vez, se ha abierto al profesorado. «Intentamos no sólo que el curso se mantenga sino que se convierta en una tradición y se establezca en el calendario», apunta Martínez que a la vez que profesor y organizador es uno más de los alumnos del curso de profesores. Clases a un nivel más elevado en el que se han reunido 12 personas procedentes no sólo del centro de formación de Burgos sino, también, de Salamanca, Pamplona o País Vasco. «Son profesores con ganas de ampliar conocimientos que no sabemos bien si podemos controlar el lenguaje moderno, aprenderlo y familiarizarnos con él para enseñarlo después a los alumnos» apunta Martínez.

Los estudiantes han podido interpretar su instrumento con lenguajes musicales del blues, el jazz  ritmos funk, hip hop o con bases electrónicas. «Son estilos que no se suelen trabajar con el violín pero sí se puede e intentamos que los alumnos puedan conocer otros lenguajes, aplicarlos a la innovación que, además, les ayuda a mejorar en la interpretación en la música clásica» apunta Oriol Saña Campony.

El profesor catalán remarca que «el violín puede tocar cualquier tipo de lenguaje, por tradición siempre hemos pensado que no pero tiene posibilidades alucinantes, es muy dinámico y hay muchas y novedosas técnicas que se pueden utilizar».  Oriol Saña es profesor de la Escuela Superior de Música de Cataluña donde se imparte el único título superior universitario especializado en violín jazz y música moderna que consta de cuatro años de especialización.

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