El Correo de Burgos

Un científico a la acuarela

Verónica Alcácer celebra el Día de Darwin con una sesión de pintura en directo creando un álbum con la vida del naturalista británico a la vera del Beagle y con un coro de niños artistas

Darío y Amelia participaron en el Día de Darwin con sus propios dibujos al mismo tiempo que la artista.-Raúl Ochoa

Darío y Amelia participaron en el Día de Darwin con sus propios dibujos al mismo tiempo que la artista.-Raúl Ochoa

Publicado por
A.S.R.
Burgos

Creado:

Actualizado:

Pintura y ciencia bailaron al mismo son durante la mañana del domingo. La artista Verónica Alcácer se llevó sus bártulos pintureros ayer al Museo de la Evolución Humana (MEH) para sumarse a la celebración del Día de Darwin. El padre de la Teoría de la Evolución nació el 12 de febrero de 1809 y todos los tripulantes del centro del paseo de la Sierra de Atapuerca festejaron el cumpleaños calándose un bombín negro y, además, abrieron sus puertas a la artista burgalesa para que creara un álbum del científico en directo como si de una retratista del siglo XIX se tratara.A la vera de la reproducción del Beagle, el famoso barco en el que Darwin se embarcó durante más de cinco años, instaló su tenderete. Ayudada por su teléfono móvil, retrato a retrato, escena a escena, recorrió la vida del naturalista británico.Desde las primeras imágenes que se conservan de él como un óleo en el que aparece con su hermana cuando tenía ocho años y en el que ya porta un ramo de flores en la mano a, esa era la idea, su época adulta, convertido ya en una autoridad, con su frondosa barba blanca y su característico bombín.De los pinceles de La Niña Vero salió también un mapamundi con las paradas realizadas por Darwin en su expedición en el Beagle, que le permitió conocer fósiles de animales extinguidos en la Pampa argentina o ver cómo la anatomía de las tortugas de las Islas Galápagos se adaptaba a las circunstancias de cada hábitat para sobrevivir. Todo esto, y más, contaba maravillada Verónica Alcácer.El álbum, titulado Craneometría de Darwin, incluye la faceta científica del homenajeado y la familiar, representada por esa imagen de su infancia y por un retrato de su mujer, Emma Wedgwood, perteneciente a una acaudalada familia que permitió al científico vivir con holgura.

La actuación de la artista contó igualmente con su coro de pequeños pintores. Tirados en el suelo, Alicia, Amelia y Darío realizaban flores, plantas, animales y otros dibujos con una precisión que hubiera arrancado los aplausos del autor de El origen de las especies.Durante la sesión, que se alargó durante toda la mañana, pasaron por allí curiosos, que, a través de las acuarelas, viajaron en el tiempo para descubrir las andanzas del científico que con sus teorías generó una revolución en la concepción de la historia de la humanidad. Un hito que bien se merece el espacio que ocupa en el MEH. Allí, el doctor Darwin recibe todos los días.

tracking