Nueva temporada expositiva del CAB
Los otros mundos del paisaje
Javier Riera juega con elementos visuales y de la naturaleza, en este caso de Burgos, en ‘Luz natural. Un vacío siempre distinto’
Luz natural. Un vacío siempre distinto es una expedición a la naturaleza, un paseo por los paisajes de la provincia burgalesa, sus montañas, sus bosques, sus tierras de secano, con una mirada de fantasía. Javier Riera transforma estos lugares habituales en otros insólitos e imprime una suerte de realismo mágico, con una persistente presencia del ciervo, y de refinada cámara de maravillas con distintos artilugios visuales (fotografías, cinotipias, filminas, pinturas...) a este proyecto que muestra en el CAB hasta el 3 de junio. Despliega su sutil y elegante manipulación de la naturaleza, que, salvando muchas distancias, recuerda los Artefactos de Francisco Infante (2012).«El proceso comienza con la localización de los lugares y a partir de ellos trabajo el tipo de geometría que es acorde con el espacio. Pienso que cuando la encuentro se genera un tipo de armonía que abre una dimensión nueva», sostiene.El autor, que se deshizo en piropos y agradecimientos por cumplir su deseo de exponer en el CAB, «un lugar de referencia absoluta en el panorama nacional», transita este camino desde hace diez años.
Ayer durante la inauguración realizaría una aproximación a este proceso con una proyección sobre la ladera del Castillo, algo que ya ha hecho con éxito en el Jardín Botánico de Madrid o Praga, y que repetirá el sábado 3 de marzo.El director de Arte de la Fundación Caja de Burgos, Javier del Campo, sugiere la similitud con las manifestaciones del Land Art, aunque con palpables diferencias.«Riera plantea una serie de intervenciones sobre la naturaleza que son verdaderamente invasivas, transformadoras y a la vez inocuas, no dejan ninguna impronta sobre ellas», advierte y subraya la larga trayectoria del asturiano, que ha firmado proyectos para el Barjola de Gijón, el Niemeyer de Avilés, el Musac en León o PhotoEspaña y tiene presencia en las colecciones de la Fundación Caja Madrid, Princesa de Asturias o en la del Reina Sofía.