La Rúa, plus añadido en el currículum de bandas emergentes

¿Qué tienen en común Rozalén, Raimundo Amador, La Pegatina, Rayden, El Gran Wyoming, Langui, Lichis o Duo Kie? Todos ellos, como tantos otros, nunca se olvidan de llamar a su amigo Jacho cada vez que vienen a Burgos. A las pruebas se remite el gerente de La Rúa, que viste las paredes del local con una muestra de estampas con dedicatoria en las que su nombre sale a relucir agradeciendo el trato recibido con o sin directo de por medio. Es lo que tiene gestionar un negocio desde hace años «trabajando mucho y siendo muy buen anfitrión». Las palabras en este caso no se las lleva el viento porque se plasman sobre los pósters exhibidos y aquellos que se acumulan a buen recaudo en la trastienda, por «falta de tiempo», pendientes de ubicación en un lugar visible.Si algo caracteriza a Jacho es su olfato a la hora de predecir el éxito de bandas o artistas emergentes que tarde o temprano acabarán dando el «pelotazo». Lo tuvo claro, sobre todo, con Rozalén. Cuando aterrizó en La Rúa dejó boquiabierto al dueño de la sala con ese «concepto diferente» que por aquel entonces carecía de respaldo multinacional. Si algo le llamó la atención fue su apuesta por la lengua de signos y no dudó en contactar con las asociaciones de sordos de la ciudad para que aportasen «calor» a un concierto prácticamente impensable hoy en día por cuestiones obvias de logística.La «pasión» por la música también se circunscribe a la escena local. Con ese objetivo nació el Concurso de Música en Directo, el «ojito derecho» del gerente de La Rúa que este sábado celebra la final de su séptima edición con el aliciente de Kitai, confirmados para el Sonorama y con el aval de llenar hasta los topes La Riviera de Madrid a principios de mes. 15 grupos compiten entre sí por un galardón que supone un plus en el currículum y que todos los ganadores exhiben en su biografía junto al listado de bandas de primera división con las que han compartido escenario.Al margen de las jugosas cuantías económicas -entre 1.500 y 300 euros-, el interés creciente de los participantes reside en la posibilidad de grabar en estudio y actuar en Sonorama, Tribu y los Sampedros. No es por ello de extrañar que la mayoría repitan hasta alcanzar las mieles del triunfo y Jacho lo disfruta, ya que el paso del tiempo le permite ver la «evolución» de esos grupos que no se rinden a la hora de alcanzar sus metas.Tras estos «años a pico y pala». las redes sociales se han convertido en el mejor altavoz para llenar la sala entre octubre y marzo. De momento, los porcentajes de votación en internet están muy repartidos. Acránima, Memocracia, Rojo Norte y Daniel Guantes se sitúan en la zona de Champions. Sin embargo, de nada sirve confiarse porque el 90% del resultado depende del jurado, que aparte de la calidad se encarga de valorar otros aspectos como la «originalidad» o la «puesta en escena».La cuenta atrás ha comenzado. Los nervios afloran entre los grupos y las votaciones de la red de redes se darán a conocer el viernes. De nuevo, la actriz Carola ejercerá como maestra de ceremonias antes de que los Kitai desplieguen sus alas sobre la tarima. Igual de aquí a un tiempo no pueden volver porque ya juegan en otra liga. O tal vez sí, porque siempre hay hueco para conjuntos míticos como O’funk’illo, que el pasado sábado se marcaron un sold out tal y como era de esperar.Después del concurso, el calendario se presenta «flojito» en abril en cuanto a cantidad. Eso sí, la calidad no hay quien la discuta: Tonino Carotone y Carmen Boza son palabras mayores. Ya en mayo, Poncho K, Runaway (Tributo a Bon Jovi) y Chiki Lora, de Canteca de Macao, se encargarán de caldear el ambiente. Además, quizá hoy pueda confirmarse la presencia del bajista por excelencia de la península ibérica: el siempre incombustible Pepe Bao.A fuego lentoHablando de música, promesas emergentes e inolvidables vivencias con artistas nivel; Jacho sorprende con un bombazo que se está cociendo a fuego lento. Junto a su hermano, trabaja en la creación de una productora «sin más ánimo que empujar a los grupos locales». El proyecto aún no ha visto la luz, aunque ya ha tanteado a varios bandas locales que le han dado el «ok». Qué duda cabe de que confían en él. Por algo será.