Teresa Cardona: «Además de que el lector disfrute, espero que dude y reflexione con mis novelas»

Ha pasado media vida fuera de España, lo que ha producido que posea un segundo ángulo de visión más descreído y desapasionado sobre nuestro país. Y bien que lo ha aprovechado en su nueva novela, Los dos lados (Siruela), la primera obra que Teresa Cardona (Madrid, 1973) publica en España tras el éxito en Francia de sus dos anteriores obras: Un travail à finir [Un trabajo inacabado] y Terres brûlées [Tierras quemadas], escritas a cuatro manos junto al autor Eric Damien y firmadas con el seudónimo Eric Todenne.

Este martes, a partir de las 18.30 horas y a través de la cuenta de Instagram del Museo de la Evolución Humana, la autora madrileña acercará su última novela, Los dos lados, a todo el público que quiera conectarse a este encuentro digital que organiza el MEH junto a la editorial Siruela.

Los dos lados es una de las apuestas del año de la colección Siruela Policiaca. «En un lujo entrar a formar parte de esta familia de grandes autores: Alexis Ravelo, Martín Casariego o Domingo Villar... Con la muerte de Domingo se me ha partido el corazón. Es un autor que me encanta y he comprobado en estas semanas el cariño que le tenían los lectores, además de nuestros editores y de muchos escritores que le conocieron. Es una gran pérdida», confiesa la autora. 

La tercera novela de Cardona narra la investigación que llevan a cabo en San Lorenzo del Escorial dos guardias civiles: la teniente Karen Blecker -separada, de fuertes convicciones y recién llegada de la Europol- y el brigada José Luis Cano -homosexual, fiel compañero y con mucho conocimiento del lugar. Además, el guardia Ricardo Suárez les dará todo su apoyo en sus pesquisas alrededor del cadáver de un hombre que aparece muerto por deshidratación en un unifamiliar del pueblo en el verano de 2016. Pero nadie sabe quién es... Las indagaciones de los agentes de la Benemérita les llevará a relacionar este caso con otro acaecido en 1989 con el terrorismo como telón de fondo.

Dicotomía y estructura

Lo primero que sorprende al lector que se acerca a esta obra es la imagen de la portada, una fotografía -en blanco y negro como todas la colección- del monasterio del Escorial dada la vuelta. «Me dijeron que es la portada que más rápido se ha decidido de toda la historia de la editorial», apunta entre risas. «Además de que la portada me apasiona, el Escorial es importante en la novela y toda esa dicotomía que hay en la historia también está en torno al monasterio: los dos pueblos, las dos sociedades -los residentes habituales y los veraneantes-, la pareja protagonista...». 

Cardona ha proyectado algunas de sus experiencias vitales en ciertas aristas de la personalidad de la teniente Blecker. «Yo he vivido mucho tiempo en el extranjero y esa mirada menos contaminada que tengo sobre el estilo de vida español se la he prestado a Karen para contrastarla también con la de su compañero Cano», explica la autora. La relación entre la teniente y el brigada tardará en conectar, pero la confianza y su afán por resolver el caso unirán sus fuerzas y destinos.  

Mientras dibujaba a sus personajes, Teresa Cardona tomó una decisión que explica de una manera muy sincera. «Cano no es homosexual por una moda ni nada de eso... En mis anteriores obras, los lectores no hacían más que preguntarme que cuándo se iban a meter en la cama los protagonistas. Mi idea no iba por ahí y me cansé bastante del asunto. Así que en Los dos lados lo resolví fácilmente con la homosexualidad del brigada Cano».

En sus anteriores obras, Cardona también utilizó dos líneas temporales para desplegar su historia. En esta novela, son agosto de 2016 y julio de 1989 los meses que se van entrelazando en las páginas del libro hasta la resolución final del caso. «Ha sido más sencillo de lo que se puede pensar... Escribo las dos historias por separado. Cuando las acabo, las intercalo en dos días en los que me tiro de los pelos delante de la mesa de la casa de mi abuelo llena de papeles», señala entre risas.

Los dos lados se inspira en parte en una historial real sucedida en Alemania hace unos años. «Fue un caso que motivó mucho revuelo por la actuación de la policía, hubo una discusión muy interesante en muchos ámbitos profesionales y de la sociedad... Además de que disfrute con una trama policiaca, yo busco que el lector de mis novelas reflexione y dude, que vea que prejuzgar es muy peligroso».

El Escorial, escenario

«Cuando mis padres marcharon para Alemania, lo único que conservaron es su casa del Escorial. Y en cuanto podía, me escapaba allí especialmente en épocas en que no había veraneantes. Es un lugar que me encanta donde a veces trabajo en mis novelas». La geografía física y humana de este paraje madrileño es un actor muy importante de la novela de Cardona: comercios, bares, rincones típicos... Incluso, algunos habitantes reales del pueblo han acabado plasmados negro sobre blanco en la narración. «Por ejemplo, el peluquero Álvaro, muy amigo mío, aparece en un momento importante de la trama. Está entusiasmado y creo que ha colocado unos cuantos ejemplares entre sus clientas... O Guillermo el de La Carpetana, una tienda muy famosa de San Lorenzo», indica con simpatía.

Los personajes de la novela también pisan en un momento de la trama la provincia de Burgos, en concreto Santo Domingo de Silos y Lerma. «Mi marido es alemán y tras tantos años viviendo fuera hemos hecho muchos viajes por España... Recuerdo ese en que recorrimos Burgos, La Rioja y Navarra, lugares muy bellos e inspiradores para luego llevar allí a mis personajes», añade.

El libro que se presenta hoy a través del perfil de Instagram del MEH, Los dos lados, es la segunda novela protagonizada por la teniente Blecker y el brigada Cano. «La primera saldrá en octubre. Se titula Un bien relativo y ambas se pueden leer independientemente», concluye la escritora madrileña.