El Correo de Burgos

Memoria de la urbe en blanco y negro

La sala Consulado del Mar acoge una muestra fotográfica que reúne decenas de imágenes de la ciudad durante la primera mitad del siglo XX

-

-

Burgos

Creado:

Actualizado:

L. B. / Burgos

«La vida ha cambiado mucho», sentencia una mujer. Sus dos compañeros de paseo, talluditos como ella, asienten. Con todo, sus rostros apenas se inmutan ante tal reflexión. Cuesta adivinar si la transformación a la que se refiere es positiva o negativa. A continuación destacan algunos avances. Pero se aprecia un resquicio de nostalgia en sus palabras. El paseo tiene la culpa. Y es que el trío en cuestión recorre -al abrigo de la lluvia- la muestra que cuelga en la sala Consulado del Mar, vestida de negro. Alberga las instantáneas para el recuerdo que Caja Vital ha 'desempolvado' dispuesta a recorrer la memoria de la capital burgalesa durante la primera mitad del siglo pasado.

Son imágenes custodiadas en el Archivo Municipal y en el de la Diputación Provincial que posibilitan «un viaje al pasado que hay que tener siempre en cuenta para poder mirar al futuro», indica el presidente de la entidad de ahorro promotora de la iniciativa, Gregorio Rojo.

La exposición, diseñada al detalle, se distribuye en nueve áreas temáticas desmenuzadas a través de estampas en blanco y negro, algunas incluso un tanto amarillentas, como si dieran fe de lo añejo del momento que pervive en su superficie.

Así, el visitante encuentra un puñado de ventanas que le permiten asomarse a las ferias y fiestas de antaño, la de ganado, cuyas instalaciones lucían emblemas tales como Ni aún en vuestras disputas profiráis blasfemias, o los toros en la plaza vieja, la que se levantaba en pleno centro; a las plazas, calles y vistas, como esa Mayor salpicada de toldos, la Aparicio y Ruiz sin rastro de pavimento o una fuente de la Flora en proceso, rodeada de toscos andamios de madera; a los desastres y acontecimientos, ¿quién no ha oído hablar de la aquella inundación de 1930 o el eclipse solar de 1905?; a edificios desaparecidos, como el palacio arzobispal que en su día hizo sombra a la Catedral, y otros singulares desde su nacimiento que todavía se mantienen; o al esplendor de barriadas obreras, agrarias o militares recién inauguradas.

Y más allá de paisaje urbano este periplo -con banda sonora de la época, por cierto- también exhibe el paisaje humano y 'retrata' a los alcaldes que otrora 'habitaron' el Consistorio burgalés y que ahora prestan su nombre a vías urbanas, como José María Ordoño, Díaz Reig, Manuel de la Cuesta o Eloy García de Quevedo; a los ilustres visitantes, desde reyes a presidentes de la República, que se dejaron ver en la urbe; a los gremios -agricultores, ganaderos, comerciantes, transportistas- que dominaban el mercado entre 1900 y 1950; en definitiva, a los burgaleses que poblaban una ciudad en ciernes que ya entonces presumía de extensa y rica trayectoria.

Cada tema de esta recopilación se acompaña de una breve explicación escrita que ahonda en el pasado local y señala datos como, por ejemplo, la confluencia en la primera mitad del siglo XX de la inauguración de la Capitanía General, el mercado de abastos, el cementerio de San José o el céntrico puente -a punto de ser derribado para reconstruirlo- en honor al ministro de Fomento de entonces, Rafael Gasset.

tracking