FÚTBOL / Segunda División B
La propuesta de los equipos burgaleses se queda en minoría
Arandina, Burgos y Mirandés apostaban por formar grupo con los representantes vascos, el cántabro y el riojano, aunque en la votación se impuso la opción en la que los equipos castellanos y leoneses quedarían encuadrados con gallegos, asturianos y extremeños
R. MENA / Burgos
Los diez clubes castellanos y leoneses que militarán la próxima temporada en la Segunda División B se reunieron ayer en Arroyo de la Encomienda, sede de la Federación de Castilla y León de Fútbol, para hablar sobre la distribución de los grupos en la categoría. El objetivo era lograr una propuesta unánime para llevar a la reunión nacional que tendrá lugar en próximas fechas en la Federación Española (puede ser incluso esta misma semana). Al final las preferencias burgalesas se quedaron en minoría.
Arandina, Burgos y Mirandés, a los que se les unió el Palencia, abanderaban una opción en la que sus compañeros de viaje serían el resto de equipos castellanos y leoneses (Palencia, Guijuelo, Cultural Leonesa, Gimnástica Segoviana, Salamanca, Ponferradina y Zamora), vascos (Athletic B, Amorebieta, Sestao River, Lemona, Alavés, Real Unión, Eibar y Real Sociedad B), el representante cántabro (Gimnástica de Torrelavega) y el riojano (UD Logroñés). Por su parte, Guijuelo, Zamora, Salamanca, Ponferradina, Cultural Leonesa y Zamora defendían la posibilidad de formar grupo con los gallegos (Lugo, Celta B, Montañeros y Coruxo), asturianos (Real Oviedo y Marino de Luanco) y los extremeños (Cacereño, Badajoz, Villanovense y Sporting Villanueva). A esta ‘candidatura’ se agregó al final la Gimnástica Segoviana, que se quedó sola, ya que su intención era entrar en el grupo madrileño.
La mayoría de las entidades castellanas prefieren cambiar la fisionomía del grupo con respecto a la pasada campaña, aunque no quiere decir que sea lo que vaya a salir. La Federación hizo esta reunión para conocer la opinión de los distintos equipos, aunque no es necesariamente vinculante a la decisión que tome en la reunión nacional.
Existen otras federaciones que defienden el modelo de grupos por la que se han posicionados los conjuntos de la provincia burgalesa, por lo que existen posibilidades que al final Arandina, Burgos y Mirandés se salgan con la suya. En el caso contrario los desplazamientos aumentarían, lo que encarecería los gastos de los equipos y mermaría el presupuesto de los tres conjuntos de la provincia.
III Copa Castilla y León
En la misma reunión se decidieron las fechas de la Copa Castilla y León, una competición que cumplirá su tercera edición y que se disputará, en su mayor parte, durante la pretemporada (la final está prevista para el 5 de octubre). El torneo ha variado su sistema de competición y se jugarán un menor número de partidos. Participarán 20 equipos (Valladolid y Numancia de Segunda, los 10 castellanos y leoneses de Segunda B, así como Almazán, Villaralbo, Real Ávila, Aguilar, Huracán Z, Atlético Bembibre, Atlético Astorga e Iscar, de Tercera). Los cuatro que la pasada campaña militaron en Segunda (Valladolid, Numancia, Ponferradina y Salamanca) estarán exentos en la primera fase y se reengancharán a la competición posteriormente.
Así las cosas, se harán cuatro grupos de cuatro equipos (Mirandés, Burgos y Arandina estarán en el B junto al Almazán). Se disputará mediante el sistema de eliminatorias directas, así si un equipo pierde en su primer partido quedará apeado. De cada grupo pasará un equipo a la segunda fase. Si sobrevive uno de los equipos burgaleses se enfrentará en los teóricos cuartos de final al Numancia de Soria y en campo propio.
El primer partido se disputará entre el 27 y el 29 de julio (Almazán - Burgos y Arandina - Mirandés), el segundo (entre los ganadores de ambos duelos) del 3 al 5 de agosto. Del 13 al 15 de agosto se jugará la segunda fase, las semifinales el 13 de septiembre y la final el 5 de octubre, siempre en el campo del equipo de menor categoría.