Un sueño recurrente

DIEGO ALMENDRES / Burgos

Dos años después, vuelven a encontrarse en la misma situación. El objetivo, llevar de nuevo al Burgos CF a la Segunda División B, como ya hicieran el 29 de mayo de 2011 con el Lanzarote como testigo. Ahora, Mikel Aurreko, Enric Maureta, Sergio Torres y Pablo Álvarez esperan conseguir el éxito a costa de El Palo malagueño y con la ayuda de El Plantío.

Aquel 4-0 frente al combinado insular ofrece la huellas a seguir por el actual proyecto. En 2011, el Burgos se plantó en el partido de vuelta con un 2-1 en contra para rematar la faena delante de los suyos y en esta ocasión deberá hacer frente a un 0-0. Imposible no recordar aquel triunfo. «Fue una sensación bonita», resume Mikel Aurreko. «Hicimos un gran trabajo sellado con el 4-0, la culminación a todo un año», valora con la esperanza de que el domingo Burgos «vuelva a vivir» la misma experiencia.

«Estamos motivados, pero hay que tener tranquilidad en estos momentos de gran intensidad y mostrar la misma línea de siempre», destaca al capitán, quien ve semejanzas entre las dos eliminatorias. «El partido en Lanzarote fue complicado como el de El Palo y, como entonces, todo se resolverá en El Plantío», señala.

Mismo análisis defiende un Pablo Álvarez que da un valor especial al tanto conseguido por Lobera en 2011 a pesar de la derrota sufrida en suelo canario. El 0-0 de El Palo, aunque positivo, obliga al cuadro local a ser incisivo y guardar las espaldas para evitar un susto mayor. «En las charlas de grupo ya he dicho que no tengo dudas de que vamos a conseguir el ascenso a la primera. Debemos ayudarnos mutuamente y estar unidos, no precipitarnos porque sé que vamos a marcar», apunta, sabedor del peligro del adversario. «Hay que respetar a El Palo porque han luchado por estar aquí. Habrá que estar atentos a balón parado y tener cuidado con sus bandas, que son muy rápidas», indica.

Sin embargo, al abrigo de El Plantío todo será más fácil. «Estamos contentos por jugar la vuelta en casa para obtener la recompensa después de 11 meses de lucha», explica, con el deseo de que las gradas registren el mismo ambiente que en 2011. «Aquel día disfruté con la presencia de 9.000 personas y ahora también ellos nos darán ese ‘plus’. Nos motivarán y ayudarán, como hicieron los 200 que fueron a El Palo», concluye.

Por su parte, Sergio Torres habla de un circunstancia «similar» a la experimentada hace dos temporadas con el deseo de que esta historia también tenga un final feliz. «Al igual que en aquella temporada, el vestuario está muy unido. El domingo hay que dar el cien por cien», comenta el centrocampista. El cordobés pertenece a ese selecto club de jugadores que conocen mejor que no nadie lo que significaría este ascenso para la entidad de El Plantío. «El Burgos no se merece estar en Tercera División. Aquí he vivido lo mejor y lo peor del fútbol porque subir y bajar en un año es algo muy duro para el jugador y, sobre todo, para los que vienen a apoyarnos cada fin de semana», indica.

Por último, Maureta da por bueno el empate conseguido en la ida. «Prefiero el 0-0 al 2-1 del Lanzarote porque con este resultado tendríamos asegurada la prórroga. Es lógico», afirma el catalán, quien ya experimentó sensaciones familiares tras conocer el nombre del rival de turno. «Comentamos que El Palo ni era el más factible ni tampoco era el peor rival posible. El sorteo nos dejó un sabor parecido al del año del Lanzarote», comenta.

Y es que tras el partido de ida el Burgos ha ganado «confianza» para buscar el ascenso delante de su afición, como ocurriera en la última experiencia en un play off. «Aquel día se volcaron. Esperamos y deseamos que vuelva a ocurrir porque fue inolvidable», señala.