El Correo de Burgos

RUGBY

El Ayuntamiento ultima el proyecto de remodelación de San Amaro

El planteamiento inicial prevé la instalación de un campo de hierba artificial compatible con la práctica del fútbol, la mejora de las condiciones de la grada y una intervención en la zona de los vestuarios . De forma paralela se contempla construir un campo de fútbol 7 en uno de los fondos

Burgos

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DIEGO ALMENDRES / Burgos

El Ayuntamiento de Burgos trabaja en el futuro proyecto de remodelación de la zona reservada a la práctica del rugby en el complejo deportivo de San Amaro. A falta de confirmar detalles como la partida definitiva destinada a esta actuación o los plazos concretos que marcarán la línea de trabajo, el objetivo del equipo de Gobierno es sacar el mayor rendimiento posible a las mejoras previstas, tal y como adelantó este periódico el pasado mes de marzo. Una vez se fijen las pautas a seguir, se comunicarán al Consejo del Servicio de Deportes.

El planteamiento municipal centrará sus esfuerzos en sustituir el actual campo de hierba natural por un nuevo material sintético compatible para el rugby y el fútbol. Si bien la primera especialidad requiere un tipo de césped artificial más alto que el habitual en el balompié, los dos deportes convivirán en este recinto.

De este modo, el Ayuntamiento aplicaría a esta instalación la misma fórmula empleada en otras infraestructuras deportivas como el José Manuel Sedano. Tanto, que también está prevista la construcción de un campo anexo de fútbol 7 similar al de la dotación del barrio de San Cristóbal.

El equipo de Gobierno facilitará la práctica del fútbol en San Amaro, tanto a clubes federados como a particulares que quieran alquilar el recinto. Sin embargo, el mayor beneficiado de la mejora prevista es el club Aparejadores de rugby, una entidad en constante crecimiento que debe dar respuesta a la demanda de su amplia estructura deportiva.

Actualmente, la zona del complejo de San Amaro reservada al deporte del balón oval es de hierba natural. Esta superficie sufre mucho por las horas de uso acumuladas durante la temporada, aunque la acción de los topos se presenta como uno de los principales problemas para su correcto cuidado. Por eso, el Ayuntamiento apostará por la instalación de césped artificial, más caro en su adaptación pero rentable a medio y largo plazo.

Otro de los puntos importantes de la actuación municipal se centrará en la mejora del servicio que ofrecen los vestuarios. La ausencia de canalización de gas impide dar la cobertura necesaria a esta dotación y los responsables municipales buscan una solución definitiva y beneficiosa para los usuarios.

También la grada pasará por ‘chapa y pintura’. El servicio de mantenimiento ya trabaja en el acondicionamiento de esta parte de la instalación deportiva, aunque no se descarta una actuación más ambiciosa tomando como referencia la estructura actual.

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