Otro paso atrás del CD Mirandés

CD MIRANDÉS    0

REAL SPORTING GIJÓN    2

CD Mirandés: Imanol, César Caneda, Álex Ortiz, Corral, Kijera, Rúper, Igor Martínez (Jordi Pablo, min. 70), Docal (Emilio Sánchez, min. 58), Provencio (Álex García, min. 57), Pedro, Juanjo.

Real Sporting de Gijón: Cuéllar, Lora, Luis Hernández, Bernardo, Álex Menéndez, Sergio Álvarez, Nacho Cases, Juan Muñiz (Carmona, min. 70), Pablo Pérez (Álex Barrera, min. 73), Jony (Santi Jara, min. 78), Guerrero.

Árbitro: Pérez Pallas (colegio gallego). Mostró cartulina amarilla al local Rúper y a los jugadores visitantes Lora y Guerrero.

Goles: 0-1, min. 40: Pablo Pérez; 0-2, min. 59: Pablo Pérez.

Miranda de Ebro

La solitaria victoria conseguida frente al Racing en la segunda jornada alivia a un Mirandés que necesita puntos cuanto antes si no quiere meterse en un atolladero a las primeras de cambio. La Segunda División es una categoría tan atractiva como traicionera, inmisericorde ante el error. Ayer, una puntual y desafortunada acción de la defensa rojilla le costó el primer gol de un Sporting capaz de controlar la situación para llevarse los puntos de Anduva.

Lo cierto es que al combinado dirigido por Carlos Terrazas no le salen las cosas bien en este arranque de temporada. Tras sumar 4 puntos de los 6 posibles en el arreón inicial del curso, el conjunto rojillo no ha levantado cabeza en la clasificación. El combinado ferroviario sólo ha marcado en dos de los cinco choques disputados y en casa únicamente ha celebrado un gol después de tres apariciones. Para colmo, esa alegría resultó estéril tras caer por 1-2 frente al Alcorcón.

Ayer, fue el Sporting el que pescó en Anduva. Los asturianos se mostraron como un bloque sólido capaz de castigar los errores del rival. Con Imanol bajo palos y Pedro en la punta en sustitución de los lesionados Razak y Urko Vera, el cuadro de Terrazas buscaba una victoria importante para iniciar su reacción en la tabla.

Sin embargo, el Sporting dio sensación de tener el partido controlado independientemente del resultado que reflejara el marcador. Los pupilos de Abelardo Fernández apenas pasaron agobios y tras el 0-1 jugaron sus bazas a la perfección.

El Sporting se llevó los tres puntos de manera merecida ante un Mirandés que apenas opuso resistencia. La revolución del once inicial rojillo no surtió efecto y la afición mirandesista despidió a su entrenador con gritos de ‘Terrazas, vete ya’.

El conjunto asturiano saltó al césped con las ideas claras en busca de hacerse dueño del encuentro, tratando de llevar el peso del encuentro con hombres como Sergio Álvarez, Jony y Juan Muñiz. Sin embargo, los rojillos fueron los primeros en avisar con un disparo lejano de Igor Martínez que detuvo Cuéllar con facilidad. Poco después, Borja Docal probó fortuna, pero también se encontró con el portero visitante.

La escuadra local intentaba evitar las faltas cercanas al área puesto que el Sporting de Gijón había sacado petróleo de las jugadas de estrategia en las primeras jornadas. Así llegó su acercamiento más peligroso, cuando se cumplía el ecuador del primer tiempo. Juan Muñiz situó una falta en el interior del área y Pablo Pérez cabeceó flojo.

Los discípulos de ‘Pitu’ Abelardo hacen una ocasión de un saque de banda. Juan Muñiz pudo aprovechar una mala salida de Imanol, pero el cancerbero navarro se rehizo con rapidez. El descanso asomaba en el horizonte, pero llegó el jarro de agua fría para los rojillos. Corría el minuto 40 cuando el equipo de Abelardo se adelantó en el marcador. El central Álex Ortiz, que debutaba como titular en liga, falló de manera estrepitosa en el despeje. Pablo Pérez se quedó solo en el mano a mano y logró batir con frialdad al meta (0-1).

Tras el paso por los vestuarios, el Mirandés dio un paso al frente, aunque sin demasiada convicción. Provencio tuvo en sus botas el tanto de la igualada después de una mala salida de Cuéllar que dejó franco el balón en la frontal. El centrocampista madrileño no se lo pensó dos veces y, pese a la distancia, estuvo a punto de alojar la pelota en el fondo del marco.

El entrenador local movió ficha dando entrada a Álex García y Emilio Sánchez en lugar de Docal y Provencio. Pero, sin tiempo para asentarse sobre el terreno de juego, el Sporting de Gijón puso tierra de por medio con el segundo tanto en el minuto 60. Jony llegó hasta la línea de fondo y Pablo Pérez sólo tuvo que empujar su envío a la red para hacer el 0-2 de su equipo y el segundo tanto en su cuenta particular.

El equipo rojillo se diluyó como un azucarillo y los asturianos mantuvieron la posesión hasta el final del encuentro. Incluso, Sergio Álvarez pudo ampliar la renta, pero su disparo desde 35 metros se estrelló en la parte superior del travesaño. Sin opción para conseguir la remontada, la afición rojilla entonó el grito ‘Terrazas, vete ya’ antes de concluir el partido.