«Lo malo no es caerse, sino no levantarse»

Fede Castaños está centrado en el partido que su equipo disputará en Guijuelo el sábado a partir de las 18,30 horas. Asegura que ha hablado «mucho» con sus jugadores sobre lo que sucedió el pasado domingo y espera que el viaje a tierras chacineras se convierta en un punto de inflexión para los suyos. No obstante, sabe que el Municipal de Guijuelo no es el mejor escenario para acabar con una mala racha.Aunque es de los que prefiere ver el vaso medio lleno y afirma que los suyos han crecido en los últimos partidos, «aunque no a la velocidad esperada». Hay otro concepto en el que insiste: «Ante la adversidad debemos ser fuertes». «El mal no está en caerse, sino en no levantarse. Hay que tener la cabeza fría y que no te afecte el mal momento. Tenemos que ser fuertes y entender que el partido no acaba hasta el minuto 90», manifiesta.

Habla de «acciones aisladas» y del perjuicio que han tenido en los dos últimos compromisos ligueros que ha disputado el equipo.Sabe que ese tipo de errores debe «desaparecer», aunque vuelve al anterior argumento. «Tenemos que aprender a superar los momentos adversos. El jugador tiene que aprender a no derrumbarse y no se puede perder un partido porque no sepamos superar esos momentos negativos», explica.

Describe un vestuario «dolido y con ganas de hacer las cosas bien». Asegura que los futbolistas trabajan con«ganas e ilusión» y que anímicamente están «bien». «Creo que en el momento que los resultados nos acompañen el equipo irá creciendo. Nos falta mejorar el estado de ánimo», declara. Pese a la complicada situación,Fede Castaños aguanta el tipo con su mejor sonrisa, aunque indica que tiene «ganas de vencer un par de partidos y estar un poco más tranquilo». Repite que tiene confianza plena en el grupo y espera que la ansiedad y los nervios no aparezcan en más partidos. «Quiero que expresen sobre el césped todo lo que llevan dentro. Cuando lleguen las victorias el equipo va a cambiar mucho», sostiene el entrenador.

La hierba artificial

Fede Castaños reconoce que es «un hándicap», aunque posteriormente no lo quiere describir como un problema y matiza. «El jugador tiene que acostumbrarse a cualquier superficie, pero es una ventaja para ellos», señala. Recuerda a los suyos que una de las claves es que el jugador «se meta pronto en el partido».«Se tienen que amoldar lo antes posible al bote, al contacto con el balón en esa superficie... Lo fundamental es adaptarse rápido. Es una plaza complicada, ya que, además del campo, Guijuelo es uno de los equipos que estará arriba», comenta.

A la hora de definir al rival, habla de un conjunto con un juego «rápido y dinámico», que está pensado para aprovechar las características de su terreno de juego.«Pero no debemos tener miedo a nadie, ya que podemos ganar a cualquiera. Sabemos que nos vamos a enfrentar a un buen equipo. Hace buenas triangulaciones, inicia el juego desde atrás y además le gusta tener el balón», señala.-MÁS INFORMACIÓN EN LA EDICIÓN IMPRESA-