Fútbol / Segunda
Demasiado castigo para el Mirandés
El combinado rojillo realizó demasiadas concesiones al Sporting de Gijón en la primera mitad / Los asturianos, en racha, dejaron el partido visto para sentencia / Los de Terrazas mejoraron en la segunda mitad, aunque sin pegada
Aitor Fernández lucha por un balón con un delantero del Sporting-Paloma Uche
GIJÓN
El Mirandés cayó derrotado por 4-1 en su visita a El Molinón en un choque con una parte para cada equipo pero en el que la efectividad corrió a cargo del equipo local, que cuando más cerca estaba del empate el Mirandés cerró el choque con un tercer y cuarto gol que sentenciaron la contienda.
Arrancó el choque con una galopada de Jony, que no pudo dar servicio a la punta de ataque, donde esperaban Carlos Castro y Carmona. Apenas un minuto después, tras un robo, Ndi fue el que buscó la portería rival. El Sporting ponía coto a la portería del Mirandés.
Tal como había adelantado Abelardo en la última semana, el Mirandés proponía un 4-1-4-1 al que el Sporting de Gijón respondía con verticalidad y velocidad en sus acciones. Fue un inicio de acciones fulgurantes.
En el minuto 10, un saque de falta que buscó la cabeza de Bernardo y el colombiano, poderoso como siempre por alto, pese al doble marcaje al que estaba sometido, centró al corazón del área, donde Carlos Castro, como una ardilla, llegó para meter el balón a gol y poner por delante al cuadro asturiano en el marcador.
En el minuto 14, un magnífico centro de Ndi y cabezazo a gol de Carmona. Metió las manos Razak, pero no pudo impedir que la inercia llevara el esférico al fondo de las mallas de su portería.
Carlos Castro, en el 18, arrancó en busca del área rival, pero le arrebataron el cuero en los últimos metros tras haber salvado a varios adversarios.
El partido se jugaba al ritmo que quería ponerle el cuadro anfitrión, que pasó a hacer un fútbol de control, a la espera de una nueva acción de ataque favorable.
Bajaba el ritmo del partido y el Mirandés trataba de ganar metros. Cuando se acercaba a la portería rojiblanca Alberto García se mostraba seguro.
Carlos Terrazas, con el 2-0 en el marcador, dispuso un doble cambio. Aitor Fernández, que había arrastrado problemas en la espalda durante la semana, dejó su sitio a Espín, el único fichaje de invierno de los burgaleses. El otro cambio fue el Jordi Pablo, que dejó su puesto a Emilio Sánchez.
Álex Ortiz veía la primera amarilla del partido en el primer minuto del encuentro en su segunda mitad. El Mirandés tenía el partido muy cuesta arriba y Carlos Terrazas quería jugarse las cartas de las que disponía ante un equipo gijonés que no estaba obligado a arriesgar.
En el minuto 54 llegó un contraataque del Mirandés en el que Carnicer puso a prueba a Alberto García, que despejó el balón, pero tocó lo justo el rechace para entregar el esférico a Urko Vera, que logró marcar.
El equipo rojiblanco necesitaba recuperar la intensidad ante un Mirandés que se hacía con el mando del encuentro.
En el minuto 69, al saque de un córner, Urko Vera remató picado y el balón, tras botar, salió alto en una acción de claro peligro.
En el minuto 72, cuando sufría el equipo con la cercanía en el marcador del Mirandés, que pisaba ya el área rojiblanca, volvió a aparecer Carlos Castro para marcar y poner el 3-1, que prácticamente cerraba el encuentro.
Dos minutos después, Fran Carnicer era expulsado tras una entrada a Carmona y el partido ya sí que sí se acaba definitivamente. Previamente, Terrazas había agotado los cambios, al dar entrada a Provencio por Álex Ortiz.
Tocaba ver pasar los minutos a la espera de nuevas ocasiones, como la que propició la incursión de Sergio Álvarez por la derecha en el minuto 83, pleno de fuerza. El balón acabó en córner.
En el minuto 88 llegó una penetración de Isma López, que dejó a Pablo Pérez y despejó el guardameta. Un minuto después hubo un contraataque de Pablo Pérez que terminó con gol de Álex Barrera. El 4-1 con el que finalizó la contienda.