El Girona trunca los sueños del Mirandés

MIRANDA

El Girona mandó a la lona a un Mirandés que pretendía engancharse a la zona noble de la general. El combinado burgalés cedió en casa frente al mejor combinado visitante de la categoría de plata nacional pese a que en el tramo final de la contienda fue capaz de poner contra las cuerdas a los catalanes. Sin embargo, careció de la puntería necesaria en los últimos metros para haber rescatado cuando menos un punto en el primero de los dos compromisos consecutivos que tiene que disputar en Anduva.

Con este resultado los visitantes se meten de lleno en la lucha por el ascenso directo. El gol de Richy en el primer cuarto de hora de juego vale su peso en oro para la peligrosa escuadra gerundense, que sufrió en los últimos compases el asedio de un equipo local que buscó a la desesperada el empate.

Los rojillos tenían la posibilidad de asestar un golpe casi definitivo para sellar la permanencia, mientras que los pupilos de Pablo Machín querían seguir manteniéndose en los puestos de privilegio y aprovechar a su vez el tropiezo del Real Valladolid tan solo horas después de que Sporting de Gijón y Osasuna empataran en Pamplona.

El primer aviso corrió a cargo del cuadro visitante. Granell probó fortuna desde la frontal tras quebrar a Dani Provencio -que repetía como titular en la zona de creación-, pero se encontró con la respuesta de Imanol Elías, que regresaba a la titularidad por la ausencia del ghanés Razak, convocado nuevamente por su selección para los compromisos internacionales de estos días.

El guardameta navarro no tuvo fortuna en su regreso a la portería. Richy ejecutó una falta lejana que se coló cerca del poste derecho, aunque el cancerbero rojillo pudo hacer algo más por despejar el lanzamiento del central catalán.

El Girona seguía teniendo opciones de ampliar la renta, sobre todo, en jugadas a balón parado. Granell superó a la barrera rojilla en una posición franca para el disparo, pero su remate se marchó por encima del larguero.

Al cuadro local le costaba llegar con criterio a las inmediaciones del área gerundense. La primera acción con cierto peligro llegó por banda derecha en un envío de Aitor, reconvertido a interior, que Urko Vera cabeceó desviado.

Los catalanes dominaban el ‘tempo’ del choque sin correr ningún riesgo en defensa ante un Mirandés que no tenía la mordiente y claridad de ideas de otros días.

La segunda mitad dio inicio con un potente disparo de Álex García con pierna derecha que despejó con la cabeza un defensor cuando llevaba marchamo de gol. El experimento inicial de Terrazas situando a Aitor como interior derecho y Provencio como medio de contención no surtió el efecto deseado lo que obligó al técnico vizcaíno a cambiar la disposición de sus hombres.

Con el ingreso al campo de Rúper, Provencio adelantó su posición en el terreno de juego mientras que Aitor Fernández regresó a su puesto como lateral en detrimento de Espín.

La mejoría fue más que evidente y los rojillos comenzaron a hilvanar mejores jugadas de ataque en busca de lograr el tanto que les diera el empate.

El extremo izquierdo Álex García tuvo en sus botas conseguir la igualada, pero su remate se escapó demasiado cruzado a la izquierda de la meta defendida por Becerra. A la parroquia rojilla no le estaba gustando la actuación del colegiado, pero Sureda Cuenca perdonó una clara tarjeta roja directa a Kijera, que cortó el avance de Aday con excesiva dureza.

Tras esta situación, el Girona perdonó el segundo gol en una buena apertura de Jandro que colocó un balón franco a Aday, pero el disparo del futbolista catalán impactó en el lateral de la red.

Igor Martínez comenzó a aparecer tras una primera parte en la que estuvo desaparecido. El vitoriano se sacó de la chistera una serie de recortes pegado al banderín de córner. Su centro al interior del área era perfecto.

Sin embargo, el pichichi rojillo Urko Vera no conectó con garantías en un cabezazo que se le terminó escapando alto. El delantero vasco lo intentó de todas las maneras posibles.

Poco después tuvo una buena oportunidad con la testa, pero Becerra atajó por bajo el cuero. El meta catalán se mostró muy seguro bajo palos y resistió con valentía el asedio rojillo en el tiempo de descuento.

El conjunto local protestó un posible penalti en el tiempo de prolongación por manos de un defensor gerundense, pero el árbitro no apreció nada punible en la acción. Con este resultado, el Girona se mantiene a tres puntos del líder mientras que el Mirandés desaprovecha una buena oportunidad de alejarse aún más de los puestos de descenso.