El CB Tizona, en el limbo

BURGOS

El CB Tizona se encuentra en el limbo, en tierra de nadie, a la espera de una redención express o de la puntilla definitiva. Ni pertenece a la ACB ni está inscrito en LEB Oro, como tampoco está sentenciado aunque las constantes vitales cada vez sean más débiles. Y es que las vacantes en la segunda categoría nacional todavía transmiten oxígeno a una sociedad deportiva que, aunque consciente de su destino final, busca en esta improvisada prórroga una desesperada solución de continuidad.La Asamblea General de la ACB confirmó ayer su negativa a inscribir al CB Tizona en la máxima categoría. La directiva local confiaba en que los clubes analizaran en profundidad su propuesta y abrieran un nuevo escenario, pero el rechazo frontal mostrado desatará la tormenta judicial.

Todo, con el enfado añadido del club burgalés debido a la explicación sesgada ofrecida por la Liga. «La entidad ha abonado solo parcialmente el canon de entrada, en concreto 150.518 euros, y no ha presentado una parte de la documentación requerida», señala el comunicado de ACB.El escrito oficial obvia de manera deliberada que la sociedad burgalesa también aportó el canon comprado al CB León y que presentó 2.4 millones de euros para cubrir otras exigencias, por lo que cantidad especificada solo representa la actualización del derecho adquirido con el visto bueno del juez.Ahora, el club esperará a recibir de forma oficial la negativa de la ACB para presentar su denuncia. «Han despachado en tres líneas cien folios y 400 millones de pesetas. Faltan en la verdad en lo que dicen», señala el presidente, Miguel Ángel Benavente, tajante en su postura. «Cumplimos todos los requisitos», subraya.Burgos y Orense, rechazado en el último momento por no salvar la auditoría, se quedan fuera de la elite mientras los agonizantes Guipúzcoa y Fuenlabrada mantienen su privilegiada situación. «No es de recibo que los dos equipos invitados por la ACB tengan entre los dos 8 ó 10 millones de euros de deuda y un club que no tiene cargas no es válido para participar. Mucha ley del deporte y ley de transparencia, pero luego hacen la vista gorda para que sigan los que están», lamenta Benavente.Este proceso es la última bala del CB Tizona para ingresar en la elite, el movimiento que pone fin a la mejor etapa del basket burgalés. Mientras los juzgados resuelven esta cuestión, el presente y el futuro del equipo se pinta en negro.De hecho, la directiva azulona protagonizó ayer su último acto oficial al frente de la sociedad deportiva. La Gala del Baloncesto regional fue el escenario surgido para la despedida, a pesar de que aún quedan muchas preguntas por responder.

Como ya anunciaran los dirigentes, sin ACB no habrá deporte profesional. Ayer también finalizó el plazo concedido por la Federación Española de Baloncesto para tramitar la inscripción en la LEB Oro y en la relación no está el club castellano.«Mantenemos lo que dijimos en la Asamblea. Si no hay nadie que tire de ésto, el club seguirá con las categorías inferiores y con los temas jurídicos. Ahora, en vez de fichar a un entrenador, deberemos fichar a un buen gabinete jurídico», señala un Benavente que no descarta tomar medidas cautelares. «Es difícil cuando luchas contra el poder, pero nuestra intención es recurrir en todas las vías y lo haremos de forma inmediata según nos remita ACB su escrito», apunta.La directiva también trabaja en la posibilidad de encontrar un relevo al frente del CB Tizona. Aunque la FEB guarda silencio en torno a las inscripciones recibidas, las vacantes existentes tanto en LEB Oro como en LEB Plata conceden a la entidad un pequeño respiro para encontrar una solución de continuidad.«Nosotros no hemos inscrito al equipo y, aunque aún habría margen de prórroga, eso siempre es un riesgo», señala Benavente antes de dar por bueno todo el esfuerzo realizado en el pasado y ahora. «Lo que hemos disfrutado no nos lo va a quitar nadie y ésto tiene que servir para que se empiece a ver la vergüenza de lo que ocurre con el deporte en este país», concluye.