Tres versiones, otro triunfo

SAN PABLO INMOBILIARIA 78

BREOGÁN 73San Pablo Inmobiliaria: Maresch (8), Sinica (11), Peciukevicius (9), Toncinic (4), Fornas (8) -quinteto inicial- Poscic (6), Huertas (12), Vega (9) y Martínez (8).Breogán: Matulionis (8), Wright (9), Dani López (5), Fede Uclés (4), Álex López (15) -quinteto inicial- Mamadou Samb (6), Nikola Rakocevic (14), Sergio Llorente (12).Árbitros: Morales y González.Eliminado: El visitante Matulionis (min. 38).Parciales: 22-17; 42-30 (descanso); 58-54 y 78-73 (final).BURGOS

El San Pablo Inmobiliaria se ha acostumbrado a escapar de situaciones complejas para salirse con la suya. Lo hizo ante el Melilla, lo consiguió frente al Leyma Coruña y lo volvió a repetir ayer contra el Breogán. A su estilo, ese en el que enreda sin necesidad partidos que tiene controlados. Al final sale airoso, que es de lo que se trata, pero no deja de ser un defecto.El cuadro burgalés es segundo en la tabla. La situación, todavía circunstancial, alimenta a un colectivo que anoche ofreció tres versiones. En la primera jugó con control, confianza y acierto para fijar una máxima renta de 16 puntos mediado el tercer cuarto. En la segunda perdió el norte para resucitar a un grande extremadamente magullado como es el Breogán. Y en la tercera sacó a relucir la sangre fría necesaria en los momentos decisivos, cuando el precipicio ya estaba a un pasito.A pesar de las difíciles circunstancias que le acompañan, el Breogán estaba obligado a responder como el favorito que es. El rendimiento celeste a largo plazo era una incógnita, pero el cuadro de Lisardo Gómez sabía que debía mostrar su mejor nivel desde un inicio caracterizado por el intercambio de canastas.Álex López tiró del carro gallego ante un San Pablo Inmobiliaria obligado a corregir cuanto antes esos detalles que todavía le impiden mostrar una mayor regularidad y solidez en su juego. Sea como fuere, los de Casadevall mostraron una buena imagen apoyados en la buena dinámica defensiva y en el acierto exterior protagonizado.El perímetro dio alas a los castellanos en un ataque estático equilibrado con las penetraciones de Peciukevicius y las rápidas transiciones desde campo propio. Los de casa ganaron revoluciones y dos triples de Rafa Huertas dieron la primera ventaja reseñable a los azules (20-14) para enfocar un buen segundo acto.Y es que un parcial de 8-2 dio paso a un nuevo escenario esperanzador. El 30-19 a 6:14 del descanso confirmaba la tendencia al alza de los locales. El San Pablo Inmobiliaria cada vez se sentía más seguro y, por primera vez en la campaña, dominó el rebote. El Breogán recurrió a Dani López para que el salmantino marcara el ritmo de la mejoría celeste, pero un nuevo arreón culminado con un triple de Sinica subió el listón hasta los 13 (42-29).Salió un tanto frío el combinado castellano en el tercer cuarto, como si supiera que con seguir la corriente obtendría el premio. Cierto es que tenía la sartén por el mango, pero volvió a perder una buena ocasión para acabar con la resistencia celeste. La tercera falta de Peciukevicius era otra razón de peso para no perder ni un instante la concentración, pero las pérdidas jugaron una mala pasada a los de Casadevall.Maresch apareció en escena para marcar la estela que debía seguir Fornas con un nuevo acierto desde el arco. El catalán situó la última máxima con el 56-40 y, cuando parecía que el partido estaba resuelto, cayó la noche cerrada en El Plantío.El desconcierto se adueñó del San Pablo Inmobiliaria. Tres malas decisiones en ataque rompieron los esquemas de un equipo que cedió la iniciativa a un Breogán que no paró de crecer. El mundo al revés en un abrir y cerrar de ojos para meter en partido al favorito. Mal asunto.El parcial de 2-14 permitió a los gallegos llamar a las puertas azules con el 58-54 con todo un cuarto por delante. Partido nuevo cuando nadie lo esperaba. Y luego estaba el factor Morales, a quien siempre le gusta dejar su sello en El Plantío. El árbitro se inventó la cuarta a Pecikevicius, un problema añadido en mitad de la tormenta.El San Pablo Inmobiliaria era un flan, pero siempre mantuvo la delantera en el marcador y recuperó el aliento cuando peor pintaban las cosas. El Breogán se situó con el 64-62 y, ahí, cuando el sol más calentaba, apareció la casta de los azules. Vilanova, responsabilizado y marcado al hombre por el entorno, dio un paso al frente secundado por Poscic y Huertas para dejar en casa otra victoria muy importante.