El Correo de Burgos

RUGBY / División de Honor B

El UBU respira aliviado

El XV local sella su clasificación virtual para la fase de ascenso tras salvar un partido lleno de imprecisiones / Álvarez premia a los gualdinegros con una patada en el último minuto

Jorge Fuente carga contra la línea defensiva del Oviedo, ayer, en San Amaro.-ISRAEL L. MURILLO

Jorge Fuente carga contra la línea defensiva del Oviedo, ayer, en San Amaro.-ISRAEL L. MURILLO

Burgos

Creado:

Actualizado:

UBU 27 - REAL OVIEDO 25UBU: López (Lucio, min. 62), Fuente, Caballero (Estébanez, min. 41), Christensen, Ferreira, Djosseu, Aristemuño, Campbell, González, Álvarez, Domínguez, Camarero (Sánchez, min. 73), Henderson, Soria (Imo, min. 60) y Martín.REAL OVIEDO: Carlos Menéndez (Landa, min. 29 (Vázquez, min. 62)), González, Roces, Pérez, Ballvé, Pintado (Ladreda, min. 56), Asensi, Méndez, Alfonso Menéndez, Guerediaga (Juesas, min. 56), Gueye, Valdés, Morán, Villena y Delgado.ÁRBITRO: Ignacio Vergara.TANTEO: 7-0, min. 2: ensayo de Ferreira que transforma Álvarez; 7-3, min. 4: golpe de castigo de Menéndez; 7-6, min. 12 golpe de castigo de Menéndez; 12-6, min. 21: ensayo de González; 12-9, min. 25: golpe de castigo de Menéndez; 17-9, min. 38: ensayo de Aristemuño; 17-12, min. 40: golpe de castigo de Menéndez; 17-15, min. 46: golpe de castigo de Menéndez; 24-15, min. 60: ensayo de Christensen que transforma Álvarez; 24-18; min. 64: golpe de castigo de Menéndez; 24-25, min. 73: ensayo de Menéndez que él mismo transforma; 27-25, min. 79: golpe de castigo de Álvarez.

BURGOS

El UBU deberá esperar una semana más para celebrar un éxito que, en realidad, es suyo a expensas de lo que ocurra este domingo en el aplazado frente al VRAC B. Los gualdinegros estarán en la fase de ascenso a División de Honor, aunque tiempo tienen para llegar a las eliminatorias con mejores sensaciones que las transmitidas ayer frente al Oviedo.Los locales sudaron para superar al cuadro asturiano en un partido lleno de imprecisiones. Los carbayones nunca se rindieron y acariciaron un triunfo que Mikel Álvarez dejó en casa con un providencial golpe de castigo en el último estertor del envite.El combinado de San Amaro encontró el premio al esfuerzo y al empuje, aunque no estuvo fino. Los constantes errores en la transmisión, los fallos de manos, la falta de continuidad en el set piece y las reiteradas faltas torpedearon al UBU e impulsaron a un buen Oviedo que siguió su plan hasta las últimas consecuencias. El recital de Menéndez en el pateo, rubricado con un ensayo en el peor momento, pudo dar un gran disgusto al XV universitario. El medio melé fue una pesadilla con el tee y el Oviedo volvió a casa con la sensación de haber perdido una gran oportunidad.Nada hacía presagiar en el arranque lo que ocurrió con el paso de los minutos. Los gualdinegros conquistaron la línea de marca en su primera visita a la 22, pero el Oviedo siempre tuvo capacidad de respuesta. Los visitantes nunca crearon peligro en el ataque organizado y tampoco lo necesitaron. Les bastó con buscar el pateo en cada golpe de castigo cobrado en campo burgalés. Una y otra vez. El 7-6 fue un primer aviso para un UBU que pronto demostró que no estaba acertado.La falta de continuidad fue otro lastre. Al menos, a los locales siempre les quedará el empuje de su delantera. Cada uno a su estilo -carbayones y castellanos-, el marcador vivió un nuevo intercambio de golpes (12-9) hasta que Aristemuño premió de nuevo las buenas intenciones universitarias con el 17-9. Restaban dos minutos para el descanso y el Oviedo no se iba a relajar tan rápido. Menéndez volvió a acertar antes del receso y el panorama no cambió en la segunda mitad.Las lesiones de Caballero y Soria tampoco contribuyeron a crear un clima de normalidad en un partido en que el UBU nunca acabó de sentirse cómodo. Los errores en la transmisión del oval fueron una cruz para los burgaleses, quienes avanzaban diez metros para retroceder después por las imprecisiones. Por lo menos, los gualdinegros jugaban en campo contrario y acertaron en la rápida acción tras una touche a cinco metros para dejar el partido encarrilado.El 24-15 a 20 minutos del final debía ser decisivo para la suerte de un encuentro que aún dio mucho de sí. El Oviedo lo volvió a hacer y limó la desventaja a renglón seguido, pero lo peor estaba por venir. Con el 24-18, Menéndez rasgó la línea defensiva burgalesa por el centro y culminó una remontada letal para los intereses castellanos.El 24-25 exigía que el UBU forzara un golpe a la desesperada y lo consiguió cuando el partido agonizaba. Era un pateo lejano y escorado junto a los banquillos, pero Mikel Álvarez calibró la mira telescópica y pasó el oval entre palos para alivio de un UBU que también sabe ganar sufriendo.

tracking