Con ilusión y margen de mejora

BURGOS

El Burgos CF asume con naturalidad la derrota sufrida en el partido ante el Sporting de Gijón B. Fue un ensayo más de pretemporada, un banco de pruebas que dio la oportunidad a Javi Duro y a Álvaro Montero de estrenarse con la camiseta blanquinegra. Ambos hacen un balance general positivo de la experiencia, conscientes de que el margen de mejora individual y colectivo es amplio.

«Vi al equipo bien», explica el joven jugador cedido por el Numancia. «Es normal que ahora nos cueste un poco, pero es cuestión de coger ritmo», explica, satisfecho con sus primeros días en El Plantío. «Me estoy adaptando bien. El partido del miércoles sirvió para coger sensaciones y la forma poco a poco», indica, consciente de que hay trabajo por hacer. «Me falta rodaje y entrenamientos, pero me sentí cómodo en el lateral», zanja.

Por su parte, Álvaro Montero vivió un encuentro con dos caras. De un lado, aprovechó la ocasión para adquirir algo de chispa y de fondo. De otro, reconoce que está lejos de su mejor momento de forma. El ariete debutó con solo dos sesiones de trabajo acumuladas y resulta «complicado» jugar a un buen nivel «sin haber entrenado con el resto de los compañeros».

A pesar de ello, el atacante se muestra «contento» con los minutos disfrutados sobre el terreno de juego. Un primer paso en el largo camino que tiene por delante. «Intentaré compensar cuanto antes ese tiempo que he estado parado y coger pronto el ritmo de los compañeros», explica.

Y es que Montero se vio «mal» sobre el terreno de juego, a pesar de mostrarse participativo y de mostrar pinceladas de lo que puede ofrecer al equipo. «Noto que me falta bastante. He trabajado, pero no es lo mismo que entrenar con el grupo», reconoce.

El delantero recuperará sensaciones con el paso de los días para afrontar con las máximas garantías una temporada exigente en la que ha depositado «la máxima ilusión». «En el fútbol cada campaña es un reto que comienza y vengo con las mayores ganas», apunta, dispuesto a «trabajar» para que las cosas «vayan bien».

«Apretaré los dientes para que sea el mejor año posible para todos», añade, consciente de que gran parte de su rendimiento se medirá por los goles marcados. Sea como fuere, Montero se siente preparado para aportar su «granito de arena» a «un gran proyecto» como es el del Burgos. «Vengo a un gran club con una gran historia y una gran ciudad», asegura.