FÚTBOL SALA / Segunda B
Intratable como local
El BigMat Fontecha Juventud logra ante el Ibarra su tercera victoria de la temporada, todas ellas en su pabellón / Los verdiblancos rompen el partido y saben sufrir en el tramo final
Mario busca a un compañero ante la presión del jugador del Ibarra Zumeta, ayer, en el Pabellón Círculo.-SANTI OTERO
BIGMAT FONTECHA JUVENTUD 4
IBARRA 3
BigMat Fontecha Juventud: Carranza, Jesús, Ercilla, More y Mario -equipo inicial- Isra, Álex, Oli, Fer, Samu y Celorrio.
Lauburu Ibarra: Zuhaitz, Aitzol, Javier, Agustín y Aldaluz -equipo inicial- Xabi, Zumeta, Garmendia, Ioritz, Andoni y Noudine.Árbitros: De Cabo y Montero (colegio salmantino). Amonestaron al local Poves y a los visitantes Endika, Zumeta, Zuhaitz y Andoni, expulsado por doble cartulina amarilla en el minuto 31.
Goles: 1-0, min. 26: Jesús; 2-0, min. 27: Oli; 2-1, min. 31: Andoni, de penalti; 3-1, min. 35: Ercilla, de doble penalti; 4-1, min. 36: Jesús; 4-2, min. 38: Javier, de doble penalti; 4-3, min. 39: Garmendia.BURGOS
El BigMat Fontecha Juventud había demostrado en el arranque de curso que ha llegado a la Segunda División B para asentarse en una categoría exigente. Y cada semana refuerza su planteamiento con buen juego y victorias como la conseguida ayer ante el Ibarra. Es la tercera del curso y todas ellas han llegado en un Pabellón Círculo convertido en un fortín.
Los verdiblancos se han acomodado en la zona tranquila de la tabla y prometen pelea en el futuro. Ayer rompieron el partido tras el descanso y apretaron los dientes en el tramo final. Y es que todo parecía resuelto con el 4-1. Sin embargo, los burgaleses tuvieron que esperar al último segundo para cantar victoria.
El primer acto fue más tranquilo. El Ibarra hizo de la paciencia su mejor arma ante un BigMat Fontecha Juventud que apostaba por las transiciones para crear peligro. Los minutos pasaban y ni unos ni otros eran capaces de dar con la tecla adecuada, aunque en el arreón final previo al descanso ambos disfrutaron de sus primeras grandes ocasiones. Carranza salvó a los arlequinados, quienes contestaron con un disparo seco de Jesús y un remate al poste de Ercilla a falta de seis segundos tras una perfecta acción de estrategia.
Ambos conjuntos dejaron lo mejor para la segunda parte. Jesús lideró las ofensivas de un Juventud que rozaba el gol y éste llegó en el minuto 26 en un lanzamiento de falta directa. A partir de ese momento llegaron los mejores minutos del equipo burgalés ante un Ibarra más pendiente de la actuación arbitral que del juego. Así, los pupilos de Zamora apretaron y ampliaron la renta con un disparo en carrera de Oli.
Sin embargo, los vascos se metieron en partido al entender los jueces que Poves desvió un balón con la mano. Quedaban 10 minutos para el final y, aunque los locales no acertaron a aprovechar su superioridad por la expulsión de Andoni, un doble penalti convertido por Ercilla supuso el 3-1 y dio tranquilidad.
Era el minuto 35 y el Ibarra se la jugó con el portero-jugador. Un gol de Jesús a la contra parecía la sentencia, pero la fe vasca a punto estuvo de costar un disgusto. Dos tantos consecutivos del rival llevaron toda la emoción a los últimos 90 segundos del choque y, finalmente, los locales se salieron con la suya.