El CSD deja al CB Miraflores a las puertas de la liga ACB

BURGOS

Un paso, un único paso separa al CB Miraflores de jugar la próxima campaña en la máxima categoría del baloncesto español. El Consejo Superior de Deportes validó ayer el principio de acuerdo alcanzado el martes por la ACB y la Federación Española para definir el nuevo marco regulador de los ascensos y descensos a partir de la temporada 2017/2018. Este trámite esperado y necesario aumenta la ilusión de un equipo burgalés que se obliga a mantener la cautela.

La entidad azul guarda silencio y, más que nunca, se refugia en la prudencia en este momento decisivo para su futuro. Los directivos locales optan por el mutismo y se remiten al comunicado oficial redactado ayer, en el que reconocen su «optimismo» tras los avances protagonizados en las últimas semanas.

«Estamos en el camino de poder cumplir con las exigencias que se planteen», explica el club azul.

Después de mes y medio de negociaciones, los poderes del baloncesto español han dado forma a una propuesta que deberá pasar el lunes por el filtro de la asamblea de ACB -11,00 horas-.

El último paso. Quizá, uno de los más complejos debido a la guerra interna que vive la asociación de clubes. Demasiados intereses en este particular ‘sálvese quien pueda’. Sin embargo, la esperada escaramuza inicial debe dar paso al sentido común.

Los clubes que conforman en este momento la elite nacional analizarán la documentación. El margen de maniobra de ACB es pequeño y los equipos contrarios a este planteamiento deberán justificar su oposición a un acuerdo aprobado por sus ejecutivos y avalado por el Consejo Superior de Deportes.

Todo ello, bajo la atenta mirada de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia. La CNMC velará por la ejecución de la resolución emitida el pasado mes de abril, en la que instaba a ACB a eliminar las condiciones «desproporcionadas, inequitativas y discriminatorias» exigidas a los equipos que ascienden.

En caso de que la asamblea logre los apoyos necesarios para ratificar los términos del acuerdo, el CB Miraflores será con toda seguridad equipo de la máxima categoría antes de que finalice el próximo 15 de julio el plazo establecido para formalizar su inscripción.

Cabe recordar que fue la propia ACB la que marcó el camino a seguir en las negociaciones al exigir de forma unilateral al CB Miraflores y al GBC (los dos ascendidos de LEB Oro) la adquisición del llamado valor de participación por un importe de 1.9 millones de euros más IVA y la elaboraración de un presupuesto mínimo de 2.3 millones de euros.

La aplicación de estas medidas «provisionales» estaba condicionadas a que no existiera un acuerdo con la FEB antes del 5 de julio. Así, la mesa de trabajo creada para la ocasión tomó esta referencia para dar forma a su propuesta definitiva el pasado martes, día 4.

Con el borrador listo, el Consejo Superior de Deportes dio ayer luz verde a una nueva propuesta más ventajosa para los aspirantes. Si los clubes de ACB dan su visto bueno a esta alternativa, el requisito económico exigido al Miraflores se reduce a 1.6 millones de euros. Además, el pago de esta cantidad se fraccionará en cuatro pagos de 400.000 euros cada uno y la inversión realizada se devolvería en caso de descenso.

Estas facilidades asegurarían la entrada del club burgalés en la elite. Otro punto favorable para el CB Miraflores es que el presupuesto mínimo también se reduce y se fijará en 2 millones de euros. Los directivos locales, por su parte, ultiman los detalles relativos a la financiación.

A una semana para que finalice el plazo de afiliación a la liga, el conjunto castellano está en disposición de conseguir aquello que se le resistió al Autocid. Sin embargo, el cambio forzado en el sistema es fruto del éxito logrado por el CB Tizona al denunciar ante Competencia la forma de proceder de una ACB abocada a facilitar ahora la llegada de los equipos procedentes de la LEB Oro.Pendientes de la reducción de equipos

La asamblea de ACB prevista para el lunes, 10 de julio, se prevé intensa. Los clubes adscritos a la asociación no solo deberán ratificar el acuerdo alcanzado entre FEB y sus ejecutivos, sino que deberán resolver otros puntos clave para el futuro de las competiciones.

Tanto es así que algunos sitios especializados ya anuncian que los cambios a introducir en las condiciones de acceso se aprobarán con mayor o menor rapidez para centrar el debate en la reducción del número de equipos en la máxima categoría.

En principio, la liga mantendrá su composición de 17 clubes las dos próximas campañas para quedarse en 16 a partir del curso 19-20. Desde entonces solo habría un descenso a LEB y un ascenso a división de honor, una medida negativa para los clubes de segunda. Por eso, la ACB compensaría a la Federación Española con 500.000 euros anuales.