La historia sonríe al San Pablo

BURGOS

Afortunadamente para el San Pablo Burgos, sus cuentas para lograr la salvación son claras y sencillas. Las cuatro victorias enlazadas por el conjunto azul en el inicio de la fase decisiva le sitúan en una posición privilegiada para lograr virtualmente su objetivo este fin de semana.

Un triunfo ante el Joventut no sería aún definitivo, pero dejaría a los burgaleses el camino expedito para celebrar el éxito más pronto que tarde en función de los próximos resultados de sus rivales directos.

La lucha por la permanencia será encarnizada en estas últimas seis jornadas y el San Pablo Burgos tiene en su mano la posibilidad de desmarcarse de sus incómodos compañeros de viaje.

De hecho, las diez victorias que jalonan actualmente la trayectoria del equipo local deben ser garantía para asegurar su continuidad en la elite del baloncesto español. En las últimas diez temporadas ningún equipo con el balance actual de los burgaleses (10-18) después de 28 partidos disputados ha dado con sus huesos en la zona de descenso al final de la campaña.

En este sentido, desde la temporada 2007/2008 solo GBC (10) en 2015, Estudiantes (11) en 2012 y Valladolid (11) en 2008 descendieron a pesar de sumar en total 10 victorias o más. Los burgaleses mantienen los pies en el suelo y centran todos sus esfuerzos en superar al Joventut en un partido decisivo que puede resolver de un plumazo todas las incógnitas que rodean actualmente al equipo local.

Habitualmente, la ACB suele presentar a un equipo desahuciado en el fondo de la tabla, pero en esta ocasión la igualdad marca la pelea abierta por la salvación. Sea como fuere, es seguro que no se llegará al caso extremo del curso 2003/2004 cuando el Fuenlabrada descendió con 13 triunfos en su casillero.

Incluso, todos los factores favorecen los intereses del equipo castellano. Zaragoza y Bilbao transitan a dos partidos de distancia, mientras que la zona de peligro se encuentra a tres victorias (Betis y Joventut). El San Pablo disputará en casa cuatro de los seis últimos encuentros y aún debe recibir en el Coliseum a los mencionados Joventut, Zaragoza y Bilbao.

Además, la actual dinámica positiva y el inminente regreso a la competición del alero Deividas Gailius son otras circunstancias que el proyecto local debe exprimir para asegurar en las próximas semanas su continuidad en la elite.

Eso sí, el San Pablo Burgos se vacía en su intento por transmitir un mensaje de prudencia. «El club sabe que no hemos conseguido el objetivo. Es cierto que ahora está más cerca y que atravesamos una buena racha, pero eso no nos asegura todavía la permanencia», recalca Diego Epifanio, para quien solo existe el «importante» partido del domingo frente al Joventut.