Barbero y Burgos BH, a lucirse en la Vuelta a Castilla y León

Con una clara vocación de protagonismo afrontan Carlos Barbero y el Burgos BH su próxima cita deportiva, la Vuelta a Castilla y León, que comienza hoy y finalizará el próximo domingo. El velocista local, que ya se hizo el pasado curso con una victoria parcial en la ronda regional (en la última etapa de 2017 entre Ponferrada y León) pretende repetir en lo más alto del cajón.

El velocista burgalés llegará a esta cita como el jefe de filas del Movistar, el único equipo World Tour de los 18 que toman parte en la Vuelta a Castilla y León. Y máximo favorito para la victoria final.

De hecho, a la vista del trazado por el que ha apostado en esta ocasión la organización de la carrera, no es descartable que el corredor local pueda luchar incluso por el triunfo en la general individual de la competición.

En esta ocasión la ronda regional ha planificado una carrera con tres etapas -el formato habitual de las últimas ediciones- sin finales en alto ni puertos de gran envergadura en su recorrido. Así las cosas las bonificaciones, el viento, las escapadas y los repechos dominarán el paisaje de la cita. Y en este panorama, arropado por el equipo más potente de la carrera, Carlos Barbero tratará de sacar provecho en busca de su primer triunfo del curso. Sea como fuere sus principales esperanzas están depositadas en las dos primeras jornadas.

El burgalés estará escoltado en carrera por Jaime Rosón, Rubén Fernández, Jasha Sutterlin, Nuno Bico, Jaime Castrillo y Héctor Carretero.

Por su parte, el Burgos BH retorna a la carretera en una de las pruebas fetiche para la escuadra local en las últimas ediciones. Tras su presencia en carreras World Tour como la Volta Catalunya o la Vuelta al País Vasco el combinado que dirige José Cabedo intentará dar un paso adelante en esta cita luchando por objetivos más ambiciosos.

El nivel de participación no será tan alto y el dominio que ejercían los equipos de máxima categoría se reducirá notablemente. De esta manera, el conjunto burgalés llega con la intención de asumir un mayor protagonismo en los más de 500 kilómetros que recorrerá la ronda. El abulense Diego Rubio y el burgalés Adrián González correrán en casa. El primero, a pesar del accidente que sufrió hace tres semanas, mantiene el buen estado de forma que demostró tener en Cataluña, mientras que el segundo viene de disputar GP Beiras (Portugal) y sumará a buen seguro combatividad al equipo. Otros cinco corredores completan la nómina: Jordi Simón, Óscar Cabedo, Matvey Mamykin, Pablo Torres y Dani López -quien tendrá dos buenas oportunidades para demostrar su punta de velocidad al esprint-.

La Vuelta a Castilla y Léon 2018 pretende rendir un homenaje al Año Jubilar Teresiano y transcurrirá por algunas de las ciudades donde Santa Teresa dejó su impronta. Por tierras salmantinas transcurrirá una primera etapa (190 kilómetros) con tres puertos  -Valero (2ª), Los Santos (2ª) y Frades (3ª)- pero sin dificultades orográficas en el tramo final. Aún más plana, pero siempre con el peligro del aire del costado en mente,será la segunda (187 kilómetros), entre Valladolid y Palencia con tres altos de Tercera.

Mucho más exigente y decisivo será el cierre del domingo, con 174,8 kilómetros entre Segovia y Ávila pasando por la Cruz de Hierro (2ª), Los Aguilones (3ª) y dos ascensos a Navalmoral (3ª y 2ª), coronando por última vez a 20 kilómetros de meta.