El Seat Arlanzón recobra el pulso

El Seat Arlanzón ha recobrado el pulso. La llegada de Jairo de la Riva al banquillo del Bupolsa ha insuflado un soplo de aire fresco a un combinado, el burgalés, que bajó ayer al barro y realizó un encomiable despliegue físico para arrancar un valioso empate frente a uno de los gallitos de la categoría, el Numancia B, que venía de golear a la Segoviana el pasado fin de semana en Soria.

Necesitaba como el comer el cuadro local una inyección de confianza, que llegó por la vía de corazón y el orden táctico. El cuadro burgalés se mantuvo a flote resistiendo apretando los dientes hasta el tiempo de prolongación. Esta vez el esfuerzo tuvo recompensa en forma de un punto que permite al equipo reivindicarse y seguir creyendo.

El cambio en el banquillo se tradujo en una importante variación táctica con respecto al esquema empleado por Ibon Begoña. Y bien que le vino al Seat Arlanzón.

Los sorianos, que pugnaban por colarse en los puestos de play-off, saltaron al terreno de juego marcando territorio, generando peligro por ambos costados con laterales muy profundos.

Pero el cuadro burgalés muy pronto cogió el aire al partido y sometió a su rival a una fuerte presión en campo contrario que dificultó sobremanera los intentos de triangulación de los sorianos.

En esta tesitura el Seat Arlanzón lograba su objetivo y desactivaba el arsenal ofensivo del Numancia B. De hecho, hasta el minuto 19 no se produjo la primera llegada al área en un disparo con la izquierda de Beli que se marchó desviado tras una buena acción por el costado izquierdo. La réplica de los locales, más tímida, llegó acto seguido en un balón peinado por Germán en el primer palo -a la salida de un saque de esquina- que paró sin ningún problema el meta Taliby.

En el tramo final del primer acto, cuando la gasolina comenzaba a escasear en el Bupolsa, el cuadro soriano llegó con más facilidad al área burgalesa. Primero lo intentó Ferrer al disparar arriba un centro atrás de Guiller desde la derecha. Y acto seguido fue Vallejo quien, en el segundo palo, remató forzado y de volea un centro desde la derecha. El esférico no encontró los tres palos.

El choque se rompió en el 36 cuando Beli, maniobrando en la línea de fondo puso un centro tenso al segundo palo. Allí apareció Guiller para empalmar el cuero con violencia al fondo de las mallas con una buena volea cruzada. Varona se despistó en la marca y el interior no tuvo oposición en su golpeo.

Pero el Seat Arlanzón nunca perdió la cara al partido y salió de los vestuarios con ánimos renovados.

Muy pronto encontró la recompensa a su trabajo. Con el segundo acto apenas comenzado Varona, que se había sumado al ataque por el costado izquierdo, tuvo la serenidad suficiente dentro del área para levantar la cabeza y servir un centro raso al segundo palo, donde apareció David para enviar el esférico al fondo de las mallas.

Jairo de la Riva había corregido la posición de sus medios centro y ahora la presión era más efectiva y el Seat Arlanzón recuperaba más balones en busca de sus dos hombres en punta, a quienes en esta ocasión les tocó ponerse el mono de trabajo en labores defensivas y apenas tuvieron opciones de lucimiento a nivel personal en el área rival.

Tras el tanto y de forma inconsciente los burgaleses fueron reculando y cedieron mucho espacio y toda la iniciativa en el juego al Numancia B. Los visitantes intentaron desequilibrar de nuevo el duelo en el 63 en una acción personal de Moha, que tras recortar soltó un latigazo desde la frontal muy centrado que Del Val repelió a córner.

Luego lo intentó Manu Calvo desde fuera del área tras un error en la salida del Seat Arlanzón, pero su disparo no encontró los tres palos.

Pero el Seat Arlanzón se rehizo y volcó por momentos, sin demasiada claridad, el juego en el campo de los sorianos con una peinada de Germán en un córner, una volea de Cosín o un disparo desde 45 metros de Adrián.

Ya en el tiempo de descuento, con los locales agotados, el Numancia B quemó sus naves y pudo cambiar el rumbo del duelo. Alfredo dispuso de una volea en el interior del área que salió muy centrada y paró Del Val. Luego Manu Calvo lo probó desde la frontal y ya en el 95 Beli envió un cabezazo al larguero.