Vuelta a empezar

BURGOS

No hay quien entienda a un San Pablo Burgos capaz de lo mejor y de lo peor. El mismo equipo que sorprende a los grandes e ilusiona por su estilo y potencial se ha dejado por el camino victorias muy importantes en la lucha por la permanencia.

La dolorosa derrota sufrida el pasado domingo frente al Estudiantes aún escuece tanto al equipo como al entorno. Sin embargo, no queda otra que mirar al frente y el conjunto local centra todas sus energías en superar a otro gallo de la competición como es el Valencia Basket (Coliseum, 18,00 horas).

«Ha sido una semana corta, pero los días se han hecho largos», reconoce Epi. El técnico del San Pablo no oculta que las derrotas aumentan «la sensación de duda» y confía en que su equipo recupere de nuevo su mejor versión para iniciar de una vez por todas una serie de partidos marcados por la regularidad.

Después del cara o cruz del último encuentro, el técnico quita el foco de esa acción decisiva para recordar que los triunfos se logran a lo largo de 40 minutos de esfuerzo y concentración. Por ello, Epi destaca la importancia de «trabajar y mejorar los detalles» a superar durante un partido sin esperar a que la fortuna decida en la última posesión.

El burgalés insiste en mejorar en aspectos como la «concentración», la «actitud» y los «conceptos» tácticos. «Eso te marca que no necesites un tiro ganador. Si prestamos atención a esas cosas igual no habría que hablar del último lanzamiento», explica.

La competición no da tregua y no le queda otro remedio al San Pablo Burgos que protagonizar una nueva sorpresa. Solo así encontrará la calma y la tranquilidad necesaria para desarrollar su labor sin un constante runrún procedente del entorno.

«Cuando vienes de una derrota todo el mundo se pone nervioso, busca soluciones y opina mucho. Hay que convivir con ello y mantener una línea de trabajo», zanja el preparador.

Epi recuerda que los inesperados éxitos sumados frente a Baskonia y Unicaja no harán que el San Pablo gane «la Euroliga de 2019». De la misma manera, «ahora tampoco hay que pensar que somos los peores». «Estamos es una liga exigente y se trata de ser un pelín mejor que la pasada semana», indica.

El CB Miraflores pasa página y confía en superar al poderoso Valencia Basket. «Es un equipo que tiene un gran potencial», recuerda Epi, quien le incluye en el nivel de los Euroliga «por presupuesto, jugadores y capacidad» a pesar de no competir esta temporada en la máxima categoría continental.

«No empezaron del todo bien por las lesiones, pero van encontrando el camino. Es verdad que tienen las bajas de Dubljevic y Sastre, pero hables del jugador que hables es un nombre top de la liga», insiste. No en vano, los taronja «tienen a dos jugadores entre los diez más valorados de la competición».

Asimismo, el técnico del conjunto azul reconoce el sello personal de su colega Jaume Ponsarnau, «un gran entrenador con una experiencia brutal». «Fue ayudante de Pedro Martínez cuando lograron la liga en 2017 y también está en la selección. Tiene un currículo envidiable», resume Epi.