Ganar partidos para ganar tiempo

BURGOS

Es una verdad de Perogrullo que este San Pablo Burgos ofrecerá su máximo rendimiento a medida que se acoplen todas las piezas de la maquinaria. Sin embargo, el ‘nuevo’ proyecto azul no dispone de tiempo para completar con calma este proceso natural.

La competición exige mucho cada fin de semana y solo la acumulación de victorias otorgará al equipo el margen deseado para trabajar con tranquilidad. «En esta liga es muy difícil plantearse algo a largo plazo», reconoce Diego Epifanio ‘Epi’. Así, los locales focalizan su atención en el siguiente compromiso, sin atender a cuestiones profundas de su planteamiento táctico.

«Hay que pensar en el próximo partido, en este caso Tenerife, y competir al máximo nivel con el que trabajo que hemos hecho y con los mimbres que tenemos», asume el entrenador burgalés.

A partir de esa premisa el San Pablo Burgos intentará «crecer» con el paso de las jornadas. La parte buena es que queda «mucha liga» por delante. La mala es que Tenerife exigirá hoy la mejor versión.

«Hay algo que entiendo como normal y es que cuanto mejores mimbres tienes y más tiempo dispones para trabajar el resultado suele ser mejor», comenta Epi, quien recuerda que los demás equipos también juegan y ponen de su parte. «Esta liga es la más igualada de los últimos años y es muy difícil», asume. De esta forma, reconoce que su plantilla «necesita tiempo», pero su «excelente trabajo» es la mejor razón para creer.

Ahí está el ejemplo de Dominique Sutton, cuyo rendimiento ha sido inmediato. El norteamericano demostró que su estilo se adapta rápidamente a las demandas del San Pablo, pero cada caso es diferente. El norteamericano debe evolucionar con el equipo, Zipser se esfuerza para alcanzar el mejor físico, Lima se machaca para superar su lesión... demasiados detalles.

Por eso, la polivalencia será una de las principales virtudes del proyecto. Es el caso de Cancar, el «superjugador» del San Pablo Burgos. «Entrena casi en las cinco posiciones», valora Epi, quien suspira por encontrar la normalidad. «Cuantas más piezas tengamos, mejor. Luego hay que esperar a que el entrenador tenga la suerte de acertar en cómo disponer de ellas», apunta.

Así, los azules buscarán soluciones si Lima no puede participar hoy. «Algo tendremos que apañar de confirmarse su baja porque creo que ningún jugador de la liga está capacitado para competir los 40 minutos. Hay que rotar y ver cómo transcurre el partido y sus circunstancias», explica. «Ojalá estén los 12», zanja.

Después de este partido el San Pablo Burgos vivirá el largo parón de febrero. La primera semana contará con todos los jugadores, a la espera de concretar cuántos competirán con sus selecciones en la nueva ventana internacional.

Hasta entonces, Epi solo tiene ojos para sus preocupaciones inmediatas, Tenerife y Lima. «Después del partido nos plantearemos muchas cosas», indica el técnico, quien adelanta la intención del club de disputar un partido amistoso en ese largo paréntesis. «Aunque parezca que no, las cosas se planifican. Sabemos lo que queremos hacer, aunque ahora ese es el menor de nuestros problemas», concluye.