El Correo de Burgos

Fútbol base

Pechu: «Nuestra obsesión ahora es ganar el campeonato»

El técnico del Juvenil A del Burgos CF, uno de los artífices del milagro del ascenso a División de Honor, asegura que la clave del éxito ha sido la «humildad y el afán de superación»

Los jugadores del Burgos CF mantean a su entrenador, Pechu.-ECB

Los jugadores del Burgos CF mantean a su entrenador, Pechu.-ECB

Publicado por
DANIEL ORTEGA CEBRECOS
Burgos

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Le han sobrado tres jornadas. Y ha entrado en la historia por la puerta grande. El combinado juvenil Hyundai A del Burgos CF jugará la temporada 2019-20 en la División de Honor. La escuadra blanquinegra aprovechó el pasado sábado su segundo match-ball para certificar el salto a la élite nacional, un hito que el club llevaba persiguiendo con ahínco en la última década.

«Ya podemos decir que somos un equipo de División de Honor. Se ha hecho largo. Saber que lo teníamos en la mano y estar parados casi 20 días no ha sido fácil. Pero ya está conseguido. Al principio del curso era algo inimaginable. Lo que otros equipos han hecho este año con 18 o 20 jugadores nosotros lo hemos sacado con 12 o 13. Es un milagro», explica el entrenador de la escuadra y uno de los grandes artífices del éxito, José Ángel de la Iglesia ‘Pechu’.

Les bastaba con sumar un punto en tierras leonesas, pero se llevaron una victoria (0-2) que dio paso a una celebración en toda regla.

«En Ponferrada, por la inactividad y el tema psicológico, esperaba algo así. No fue un partido brillante. Marcamos pronto, algo que no entraba en el guión. Y luego hicimos un duelo serio, pero nada más. Jugamos con fuego y no nos quemamos, también porque el rival no se jugaba nada. Arriesgamos y salió bien. Teníamos la suficiente ventaja con los rivales para poder asumir el riesgo de haber disfrutado de unas vacaciones muy largas», agrega.

El responsable del banquillo blanquinegro destaca los méritos contraídos por sus jugadores en una campaña para enmarcar. «No pudo ser en el primer match-ball, pero por los resultados de terceros. Nosotros cumplimos. Este equipo lleva 24 jornadas consecutivas puntuando y ha vencido 15 de los últimos 16 choques que ha disputado. Ganar tantos partidos seguidos en una categoría tan dura no es nada sencillo. No es normal. Hemos ascendido un año en el que Parquesol, Cultural e incluso Puente Castro han hecho apuestas muy decididas para subir a División de Honor. Todos sabíamos que iba a llegar, pero queríamos que fuera cuanto antes mejor para que nos dejara la puerta abierta a disputar el título liguero».

Esta será precisamente la gran meta del equipo en los tres partidos que tiene por delante (el segundo clasificado, el Valladolid B, está a tres puntos. «Sobre todo pensando en los jugadores de tercer año, que han sido la columna vertebral del equipo esta temporada y que no van a poder disfrutar el año que viene en División de Honor. Me haría gran ilusión ganar el campeonato. El objetivo del ascenso está cumplido, pero no tiene nada que ver subir como segundo que ser campeón. Esa es mi obsesión, los chavales lo merecen. Estamos ante una oportunidad única para el club».

«Tenemos golaverage particular igualado con el Valladolid B. En el general tienen más goles a favor. Los dos equipos nos tenemos que enfrentar al Peña en un duelo en el que tenemos que marcar un buen número de goles. Quiero ser campeón ganando los tres partidos. O empatando como mucho uno para no ir al desempate».

Pechu tiene muy claro cuál ha sido la clave del éxito deportivo de su escuadra. «Ha tenido que ver mucho con la humildad y el afán de superación de los jugadores. Cada adversidad que ha habido, y han sido mucho muchas, les ha hecho más fuertes. Nunca se han rendido. No tiene quizás que ver el fútbol, sino con el vestuario, con el compromiso, con el tipo de personas y con la confianza que nos daban los buenos resultados. Y con el valor extra que aporta el hecho de que son jugadores de la casa, de su sentido de pertenencia, de llevar muchos años en la estructura del club. Para ellos casi era una obsesión conseguir el ascenso. Y lo han mostrado día tras día en el campo. Es un equipo que no hace un fútbol espectacular, que no tiene jugadores espectaculares, pero que lleva siete meses sin perder», destaca José Ángel de la Iglesia.

PLANTÍO

La directiva del club quiere premiar al equipo dándole la opción de jugar el último partido liguero, un derbi contra el Promesas, en El Plantío. Pero está aún a expensas del posible horario unificado y la coincidencia ese día con el San Pablo de baloncesto. «Si se puede cuadrar se jugará allí», finaliza Pechu.

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