El Burgos CF se rearma para echar un pulso al Calahorra

La Liga está dando sus primeros pasos, pero el Burgos ya ha consumido una buena parte de su margen de error. La escuadra blanquinegra busca esta tarde un punto de inflexión que le permita catapultar su confianza y recuperar el favor de una afición que ha asistido impertérrita a un arranque liguero que dista mucho de las elevadas expectativas con las que arrancó el curso.

Y todo pasa por la consecución de la primera victoria de la temporada, con el Calahorra como invitado de excepción a lo que pretende ser una fiesta en honor de la fiel parroquia blanquinegra (El Plantío, 17,00 horas).

El cuadro castellano se ha conjurado esta semana para revertir una situación incómoda que ha generado cierta incertidumbre en el vestuario. El equipo no termina de carburar, ofreciendo demasiadas concesiones a sus rivales de turno y sin capacidad para asumir el mando y el protagonismo en el juego.

Ha llegado la hora de cambiar el rumbo y que el proyecto remonte el vuelo hacia los puestos de privilegio de la tabla clasificatoria. Tres empates consecutivos en otros tantos choques disputados no han dejado buen sabor de boca en la afición, a la que el Burgos CF pretende premiar hoy con tres puntos balsámicos.

No será una misión sencilla, pues enfrente les espera un cuadro riojano que ha arrancado con muy bien pie la temporada pese a su condición de modesto. No en vano los calagurritanos cuentan con 5 puntos en su casillero y se mantienen invictos -solo han encajado un tanto en tres encuentros-, lo que les otorga una dosis extra de moral frente a un ansioso Burgos CF.

Es la hora de la verdad. Y no valen las excusas. No ha sido la actual una semana fácil en el seno del combinado blanquinegro. A la presión que se palpa en el vestuario por la falta de resultados y buen juego se ha unido en esta ocasión la sorpresiva decisión del propietario del club, Antonio Caselli, de prescindir de los servicios del director deportivo, César Traversone.

Pero los blanquinegros están obligados a superar estas adversidades para recuperar el crédito que se ha dejado en el camino.

Para la disputa de este compromiso Fernando Estévez contará con la baja segura de Borja Sánchez, quien deberá cumplir el partido de sanción que le ha impuesto Competición por su expulsión del pasado fin de semana en Haro.

Es una baja que trastoca los planes del técnico blanquinegro, pues el centrocampista es uno de los hombres más en forma de la plantilla y el elegido por el granadino para dotar a la medular de argumentos ofensivos.

Así las cosas, el Burgos CF volverá a cambiar una semana más su pareja de medioscentro. La recuperación de Carlos Indiano, que se había quedado fuera de las convocatorias por una elongación muscular sufrida en el debut liguero, permitirá al entrenador recuperar al que está llamado a convertirse en el faro del juego ofensivo. En esta ocasión todo apunta que formará pareja con Albistegui.

Con respecto al choque de Haro se prevé el regreso de Carlos Martínez al lateral derecho, con Undabarrena y Córdoba en el eje central. Ytodo apunta a una línea de ataque compuesta por Juanma, Donovan, Pisculichi y Toché (o Marcelo) como hombre más adelantado.

El preparador ha trabajado esta semana con un doble plan que pondrá en práctica en función de los argumentos de su contrincante y el resultado que campee en el marcador. En caso de necesidad optará por un juego más directo con Marcelo y Toché en la punta del ataque y solo un mediocentro.

El cuerpo técnico y la plantilla son conscientes de la situación de necesidad que vive el club. Por eso no ocultan que el choque de hoy tiene para ellos un carácter de «final». «Tenemos que ganar y dar un paso adelante. Una victoria nos daría serenidad y le debemos una a la afición», reconoce Fernando Estévez.

Con la intención de cambiar el rumbo de los acontecimientos el preparador granadino ha variado esta semana su método habitual de trabajo, focalizando las sesiones a la consecución de mayor «intensidad», una de las carencias mostradas por el equipo hasta el momento -sobre todo en los compases iniciales de cada compromiso-. «Nos falta eso y lo buscamos en los entrenamientos reduciendo el contenido táctico. Hemos dado más importancia al ritmo que a otros aspectos al juego», agrega.

Con respecto a su rival de turno Fernando Estévez asegura que el Calahorra es una escuadra muy «dinámica». «A nivel defensivo se hace un bloque en campo propio, pero en ataque quiere balón». Pero el objetivo de su escuadra es conseguir llevar la batuta del encuentro, alcanzar el buscado protagonismo que hasta el momento no ha encontrado. Sea como fuere el entrenador del Burgos CF es partidario de relativizar la situación del equipo y hace una vez más un llamamiento a la tranquilidad, pues destaca que el objetivo es estar en puestos de play-off al final de la temporada. «En cursos pasados equipos como el Recreativo, Cartagena, Logroñés, Mirandés,Castilla o Atlético de Madrid B no tuvieron arranques buenos y acabaron jugando play off o ascendiendo», matiza.