El San Pablo ya sabe sufrir

MOVISTAR ESTUDIANTES  76

SAN PABLO BURGOS  78Movistar Estudiantes: Pressey (11), Brizuela (15), Vicedo (-), Kadji (6), Arteaga (2) -quinteto inicial- Dangubic (11), Palacios (12), Dukan (9), Scrubb (10), Arroyo (-), Giedraitis (-).San Pablo Burgos: Fitipaldo (3), Benite (17), Salvó (1), Clark (18), Lima (14) -quinteto inicial- García (-), Barrera (6), Vega (-), McFadden (12), Rivero (6) y Bassas (1).Árbitros: Cortés, Oyón y Rial.

Eliminados: El local Kadji y el visitante Rivero.

Parciales: 10-17; 28-35 (descanso); 52-58 y 76-78 (final).BURGOS

Respira aliviado el San Pablo Burgos después del sofocón vivido ayer en un partido que pudo resolver mucho antes sin necesidad de acudir al cara o cruz. Por una vez, la fortuna sonrió a la SAD burgalesa en un final apretado y el aro escupió la última acción de Brizuela que llevaba el sello de la prórroga.

El bloque de Joan Peñarroya logró una victoria clave antes de iniciar la fase más dura de la primera vuelta. Era el primer día en liga sin Goran Huskic, el primer día de Rivero en la rotación y el primer día en el que Tokoto se quedó fuera para hacer sitio al cubano en la convocatoria. Quizá también sea el primer paso para su salida del club. El tiempo dirá. Incluso, fue el primer día en ACB de un Marc García que tuvo un debut testimonial en la primera parte.

Por rizar el rizo, el de ayer fue el primer triunfo del San Pablo Burgos en el WiZink Center. Se sacudió el gafe en un momento oportuno para aferrarse a las posiciones de privilegio de la clasificación. Y es que no fue el encuentro más brillante del equipo del Coliseum, capaz de sobrevivir a sus malos porcentajes desde el triple y al potro de tortura de los tiros libres.

A pesar de todo, los ayer blancos se las apañaron para mantenerse por delante en el marcador de principio a fin. Salvó, arrinconado en los últimos compromisos, salió de inicio para contener a Vicedo en el puesto de ‘3’ alto en esta nueva composición sin Tokoto.

La apuesta pudo salir redonda si el San Pablo hubiera mostrado el menor acierto desde el perímetro en un inicio desconcertante. Para muestra, el primer ataque. Hasta cuatro rebotes ofensivos capturaron los visitantes en la misma acción, sin premio. Al menos, el Estudiantes también se metió en esta espiral de intercambio de errores y aciertos.

El San Pablo tomó resuello en cuanto conectó con Lima por dentro. El brasileño fue superior en la pintura, cuajó un partidazo con 14 puntos y 14 rebotes y completó a un Clark protagonista. Con sus altibajos, el americano es un jugador clave en este equipo. Tiró del carro en ataque, aportando también intimidación en defensa para cimentar la primera ventaja con otro empujón de Benite.

El marcador fue una montaña rusa continua en la que los blancos no fueron capaces de asegurar su ventaja. A la vez, resolvieron los problemas con contundencia cada vez que el rival se acercó. Palacios marcó a los colegiales el camino a seguir y del prometedor 8-17 se pasó a un 20-19 tras acumular varias pérdidas innecesarias y un 0/10 en triples.

Volvieron Clark y Lima para reconducir la situación. El americano, sin estar del todo fino, era el único con la mínima continuidad anotadora y su equipo lo agradeció. Y ahí apareció McFadden para clavar el 28-35 del descanso. Para entonces, los castellanos ya gobernaban la lucha por el rebote.

Poco cambió el guion en la segunda mitad. Empezó bien el cuadro de Peñarroya con el 28-39 y tuvo opción de llevar el partido a los 14 de ventaja. Clark falló en el 6.75 y a continuación Benite cometió una antideportiva que animó al Estudiantes.

Ni siquiera la acumulación de faltas de Kadji y Brizuela alivió a un San Pablo que no supo gestionar este momento del encuentro. Poco a poco el rival recortó la diferencia y llamó a la puerta con el 44-45. Lo haría varias veces más durante el choque y, afortunadamente, los visitantes siempre salieron a flote.

De nuevo, Clark y Benite asumieron la responsabilidad y dieron un poco de aire a los castellanos al final del tercer periodo (52-60). El San Pablo ya se había visto en esta situación y volvió a desaprovecharlo con un parcial de 6-0 resuelto en el momento más oportuno con dos aciertos de Barrera y McFadden desde el arco.

Ese 58-67 debía ser clave, como también debía serlo el 66-75 a 2:50. El acierto por fuera apareció en el momento necesario y tampoco fue suficiente porque entonces falló el rebote. En 25 segundos el Estudiantes selló otro 5-0 y todo se resolvió en el último minuto con 73-76 para los burgaleses.

El San Pablo no fue capaz de echar el cierre a la victoria. De cerca, de lejos, desde el tiro libre... no hubo manera. El Estu, por su parte, tampoco dio con la tecla.

Dos aciertos contados desde la personal de McFadden y Clark, unidos a dos fallos decisivos de Pressey dejaron el 76-78 con 4 segundos por jugar. La última fue para el Estudiantes y Brizuela lo hizo todo bien para forzar la prórroga. Todo, menos acertar con el aro para alegría de un San Pablo que cerró la semana con tres victorias sin fallo.