El Correo de Burgos

BALONMANO / Primera Nacional

El UBU San Pablo saca el rodillo

La escuadra burgalesa logra su duodécima victoria consecutiva ante el Unión Financiera Oviedo / El conjunto asturiano solo aguantó el ritmo local los primeros 20 minutos

Un jugador del conjunto burgalés se dispone a lanzar a portería.-SANTI OTERO

Un jugador del conjunto burgalés se dispone a lanzar a portería.-SANTI OTERO

Burgos

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UBU SAN PABLO 34

U. FINACIERA OVIEDO 20

UBU SAN PABLO:Ibrahim, Gastón (2), Alberto González (3), Espinosa (5), Blanco (2), Toro, Rasero, Iker Antonio, López (6), García (2), Rodríguez (3), Alejandro González (2), Torres (4), Tamayo (4) y Germán (1).).

UNIÓN FINANCIERA OVIEDO:Campo, Echevarri (2), Blanco (1), Huerta (7), Hechavarria (1), Sánchez (1), Revin, César Germán, Menéndez (1), Zapico (2), Álvarez (1), Suárez, Mon, Díez (1) y Ortega (3).

ÁRBITROS:López y Hernández. Mostraron tarjeta amarilla a los locales García y Nacho González (entrenador, así como al visitante César Germán. Excluyeron con dos minutos a los visitantes Hechavarria, Revin y Díez.

PARCIALES CADA CINCO MINUTOS:2-1, 4-3, 8-6, 10-9, 12-10, 16-11 (descanso), 18-11, 21-13, 23-14, 17-16, 30-18 y 34-20 (final).El UBU San Pablo sigue a su ritmo.El conjunto burgalés consiguió ayer su duodécima victoria y sigue contando las jornadas por triunfos. La escuadra de El Plantío pasó por encima del Unión Financiera Oviedo.A priori era un encuentro complicado, un duelo que el conjunto de Nacho González debía afrontar con la guardia alta.Sin embargo, el choque cayó del lado castellano de forma contundente y el marcador de 34-20 con el que concluyó el partido dejó muy claro qué equipo dominó la contienda.

Los asturianos solo compitieron durante 20 minutos. A partir de ahí fueron perdiendo fuelle y acabaron siendo un juguete roto en manos de una escuadra burgalesa que hace una demostración de fuerza en cada encuentro que juega.

El choque comenzó igualado y el paso de los minutos mantuvo las espadas en todos lo alto. Los de casa no eran capaces de irse en el marcador.Tenían las riendas del juego, aunque no lograban sacar de rueda a un oponente que se aferraba al partido con todo su empeño.

Una vez que pasaron los primeros 20 minutos el conjunto de Oviedo tuvo que aflojar el paso. No pudo mantener el ritmo que imponían los de casa y quitó el pie del acelerador, exhausto y mermado por el sobresfuerzo. Fue entonces cuando salió a relucir la calidad del UBUSan Pablo.

La diferencia comenzó a crecer a pasos agigantados y se situó en los 5 goles (16-11)en el descanso. El choque estaba encarrilado para los locales, aunque quedaba por comprobar como afrontaba la reanudación la escuadra ovetense. Tras el intermedio se pudo comprobar que los visitantes se habían desfondado, por lo que en el segundo periodo el conjunto de Burgos se mostró muy superior y lo único que hizo fue agrandar la brecha en el electrónico hasta el 34-20.

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