Aitor Córdoba regresa a casa

El del domingo será un partido «especial» para Aitor Córdoba. Sarriena fue su casa las cinco últimas temporadas y es algo que no ha olvidado. «Mentiría si dijera que es un partido más. Tengo buenos amigos en la plantilla, en el pueblo, en la directiva, en el cuerpo técnico... Supongo que tendré un poco de nervios al ver a la gente antes del partido, pero una vez que empiece serán tres puntos más. Nos jugamos mucho y tenemos que sacar el partido adelante», comenta. Ha compartido vestuario con la mayor parte de los futbolistas que militan en la escuadra vasca y tiene una buena relación con todos ellos.

Prevé un choque con «juego directo y mucha segunda jugada» y advierte de la peligrosidad de los puntas del Leioa, el ex blanquinegro Yurrebaso y Pradera. «Se manejan bien en este tipo de juego y son peligrosos en el área rival», avisa.

La receta es sencilla para hacer frente a un oponente que tratará de llevar el choque a su terreno. La «adaptación» será clave. «Si controlamos esas disputas y segundas jugadas que se generarán después de los golpeos, tendremos parte del partido en nuestras manos. Pero lo difícil es ir allí y adaptarse. Eso es lo complicado, por lo que hay que estar con los 5 sentidos durante todo el partido», explica.

Uno de los aspectos a mejorar por parte de los blanquinegros es la contundencia en ambas áreas. El conjunto de Salmerón en los últimos partidos encaja con excesiva facilidad y le cuesta ver portería. El central vasco asegura que están trabajando duro para ganar fiabilidad en las dos porterías y confía en que pronto pueda reflejarse en el campo.

Los tres puntos en juego serán importantes tanto para vizcaínos como para castellanos. El burgalesista admite que ninguna de las dos escuadras pasa «por un buen momento», aunque confía en que el equipo regrese a la senda de la victoria y se pueda ir «contento al parón navideño».

Será un choque «complicado» para los intereses blanquinegros y advierte de que la clasificación «no dice el potencial que tiene el Leioa» -está en puestos de descenso-. «Tampoco sabemos cómo estará el terreno de juego, pero estoy seguro de que habrá mucha disputa, mucha segunda jugada, mucha lucha... Tenemos que estar los 90 minutos al cien por cien porque allí de cualquier ocasión puede llegar un gol», señala.

La mala racha ha hecho mella en la moral del Burgos CF, aunque Córdoba asegura que el vestuario «no está agotado ni de cabeza ni de piernas». Insiste en el trabajo como fórmula adecuada para regresar a la senda del triunfo y hace autocrítica. «No hemos funcionado como teníamos que hacerlo. Pero no hay una fórmula matemática que nos diga qué estamos haciendo mal, porque si existiera lo solucionaríamos. La cosa ahora está de que no, aunque el juego tampoco está siendo el óptimo, pero estoy seguro de que la mala racha la cortaremos y llegarán los malos resultados.