Barrera quiere cerrar el círculo

BURGOSÁlex Barrera no es un cualquiera en el baloncesto burgalés. Es el narrador en primera persona de la epopeya protagonizada por un Hereda San Pablo preparado para escribir otra página dorada de su cuento de hadas.Aquel talentoso jugador que llegó a Burgos en 2016 en busca de minutos de calidad en LEB Oro disfruta de su quinta temporada en el club azul. Un pestañeo en una vida y todo un mundo en una carrera deportiva. Ha pasado todo muy deprisa entre grandes alegrías y algún que otro momento de duda. Quién iba a decirle que el Hereda San Pablo sería uno de los nombres propios de la ACB, que ganaría una Basketball Champions League y que ahora aspiraría a conquistar la Copa Intercontinental.«Viajar hasta Argentina en busca de un trofeo internacional es algo que no me hubiera creído hace unos años», reconoce el exterior catalán, quien refleja las «ganas» y la «ilusión» de todo el equipo del Colieum. «Tenemos la oportunidad de ganar otro título. Nos enfrentamos al campeón latinoamericano y todo lo que rodea al evento es especial», reconoce.No tiene tiempo el San Pablo Burgos para pararse a saborear todo lo que está consiguiendo, pero está claro que los resultados y la «progresión» descrita «dice mucho» del proyecto.Centrado en el presente, el conjunto castellano exprime el momento. Y es que «no hay que pararse a pensar mucho para entender que es el mejor año de la historia y eso que estamos aún a mitad de curso». El partido de este sábado ante el Quimsa argentino es otro paso adelante muy importante en la trayectoria de una entidad azul que ya trabaja para «seguir esta línea de éxitos» en el futuro, aunque Álex Barrera destaca la importancia de «no perder nunca la perspectiva ni dejarnos llevar por los logros del momento».El vestuario lo está disfrutando de lo lindo, con solo un ‘pero’. «Ojalá no fuera en esta situación porque la afición sería aún más partícipe. Siempre decimos que nos gustaría compartir todo esto con ellos, pero es lo que toca ahora. Eso sí, nos transmiten su ánimo por la calle o a través de las redes sociales», comenta.Y es que el nivel mostrado esta campaña por el bloque de Joan Peñarroya no está al alcance de muchos. «El club siempre nos exige competir al máximo cada partido que juguemos», recalca un Barrera consciente de la dificultad de compaginar hasta cuatro torneos en este mes. «Solo jugar en ACB ya es algo importante y muy exigente. Hemos visto casos de equipos que participan en dos competiciones y eso les ha perjudicado en una de ellas. Nosotros lo llevamos bien y estamos en un buen nivel», celebra.Se cuentan por decenas los momentos en los que el equipo azul «respondió» a la perfección en situaciones muy complejas y esta vez se adapta a la baja de Alex Renfroe. «Todos las temporadas tienen sus momentos difíciles y ahora que estamos sin Alex el resto debemos dar el máximo», zanja.La Copa Intercontinental espera a un Hereda San Pablo dispuesto a conseguir otro hito para el recuerdo, aunque el equipo del Coliseum extrema las precauciones porque todo puede pasar en un cara o cruz. «Estamos mentalizados y con confianza, pero debemos tener en cuenta que se trata de un título a un partido y que existe un gran riesgo porque no hay margen de error», comenta un Barrera que considera esta aventura muy positiva para el futuro. «Esta experiencia nos preparará para afrontar el próximo debut en la Copa del Rey», explica, con el encuentro de cuartos de final ante el Tenerife del próximo 11 de febrero en el horizonte.Antes está el Quimsa y los azules preparan con mimo un partido con unos condicionantes muy diferentes a los habituales. «Siempre hay diferencias en el baloncesto según dónde se juegue. Ya lo notamos cuando competimos en la BCL y seguro que también ocurrirá esta vez. Ya estamos viendo por dónde podemos atacarlos», explica un Barrera que sueña con levantar la Intercontinental al cielo de Buenos Aires.