La estadística refuerza al Burgos CF

El triunfo logrado el pasado domingo frente a la UD Las Palmas impulsa a un Burgos CF que se permite mirar hacia arriba cuando aún resta un tercio del campeonato. Si bien queda un largo camino que recorrer hasta celebrar la consecución del objetivo de la permanencia en el fútbol profesional, los blanquinegros disfrutan de una posición privilegiada en la tabla.La historia avala el rendimiento mostrado hasta el momento por el proyecto de El Plantío. Y es que ningún equipo ha descendido con el balance actual del Burgos CF desde que en 1997 se instauró la liga de 22 clubes en Segunda División.Los 38 puntos que suma en este momento el cuadro dirigido por Julián Calero son sinónimo de éxito. Por ejemplo, los locales igualan en esta jornada 27 del campeonato los números de su último precedente en la categoría, allá por 2002. Entonces, el equipo de Enrique Martín comenzó el curso como un cohete para perder fuerza en la segunda vuelta y lograr la permanencia deportiva con 52 puntos. Después llegaría el descenso administrativo. Ahora, la tendencia invita a pensar en un final de curso tranquilo en todos los aspectos.El técnico blanquinegro insiste en mandar un mensaje de cautela porque cualquier despiste puede suponer un resbalón inoportuno y la falta de experiencia puede jugar una mala pasada. El precedente protagonizado por el Numancia en 2020 está muy presente en El Plantío, pero hay ciertos aspectos que diferencian las circunstancias vividas por los rojillos de las actuales.Entonces, el conjunto soriano sumaba 37 puntos en la jornada 27 y descendió con 50 puntos. Ningún equipo dio con sus huesos en la tercera categoría con esos parámetros y, además, el margen de los numantinos aquella campaña era menor que el que disfrutan hoy los locales. Y es que los rojillos tenían 8 puntos de ventaja con respecto al Albacete, por los 12 que maneja el cuadro de Calero sobre el Amorebieta.Salvo la excepción mencionada del Numancia, cabe destacar los casos vividos por el Granada 74 en 2008, con 36 puntos a estas alturas, o los 35 del Cádiz en el mismo curso. Misma situación vivieron con 34 puntos el Sabadell en 2012, el Jaén con 2014 o el Elche en 2017. Pero ninguno de ellos alcanzó entonces los 38 puntos amarrados por un Burgos CF que solo centra su atención en el partido a disputar este domingo frente al Real Oviedo, una nueva oportunidad para acercarse más a la línea de meta.