Aparejadores se sobrepone a un mal inicio y vence al Cisneros en un partido vibrante

Recoletas Burgos-Caja Rural y RC Complutense Cisneros ofrecieron al respetable presente en las instalaciones Bienvenido Nieto un precioso partido de rugby que mantuvo su emoción hasta casi el final y que sólo se decidió de lado burgalés por pequeños detalles.

El partido no comenzó tal y como esperaba el entrenador del Recoletas Burgos Caja Rural José García, pues apenas habían transcurrido dos minutos de juego cuando un error de bulto provocó el primer puntapié de castigo de los madrileños qjecutado por Xabi González (0-3).

Un despiste serio pero aislado porque en los siguientes minutos el Recoletas pasó a dominar de forma bastante clara y jugando casi todo el rato en la parcela del oponente amenazó muy rápido con hacer daño. Así, tras un par de acercamientos en el 9´ el equipo recuperaba la pelota en una touche del rival en su línea de 22 y en la siguiente jugada tras ganar una propia en idéntica zona pero del campo rival, movió de forma muy rápida hasta el lado opuesto del campo para que finalmente Masuyama sacara todo el partido a su velocidad endiablada y consiguiera un primer ensayo con los que los burgaleses remontaban el resultado de forma clara pues después en la transformación Carrió no falló e instalaba en el luminoso un esperanzador 7-3 que allanaba el camino a la victoria.

La primera llegada a los palos madrileños no hizo sino aumentar la confianza de los locales y aunque los visitantes buscaron su suerte e inquietaron bastante, hombres como Bustos demostraron su serenidad y contundencia para no dejar ninguna opción a los universitarios.

Hasta que en el 20´ y después de una larga y laboriosa jugada donde Nicolás Rocaires ejerció de director de orquesta sin descanso ni fallo alguno para que el equipo ganara en superioridad el carril izquierdo del ataque y de nuevo Masuyama apuntillara con un segundo ensayo en su cuenta personal. 

Carrió tampoco falló en la transformación y los burgaleses agarraon una venataja superior a los 10 puntos.

El duelo parecía controlado hasta ese momento pero en el siguiente tramo los madrileños apretaron duro en lo defensivo y aprovechando los errores locales y sus problemas en la touche, tanto propias como ajenas, consiguieron encerrar a un Recoletas que atravesó por su primer mal momento de la tarde, pero que peleó en lo defensivo con bravura, como quedó demostrado al filo de la media hora en el puntapie de castigo conseguido por el visitante Xabi González, que llegó depués de dos minutos de jugada bajo la línea de palos burgalesas. 

El Cisneros supo sacar partido a su buen momento y tres minutos más tarde el especialista Xabi González tampoco fallaba y colocaba un ajustado 14-9 en el marcador.

En ese momento decisivo el Burgos tiró de calidad y fortuna, porque aprovechando un error de Xabier González en un balón largo y una Touche donde el oval llegó a tocar el suelo pero cazó Sacovechi, terminó firmando un ensayo de Caini y una transformación de Carrió que hicieron mucho daño en lo psicológico al rival.

De ahí al descanso la igualdad se mantuvo y en una maul muy trabajada que terminó con ensayo de castigo donde Caini fue excluído, los madrileños recuperaron parte de la desventaja y dejaban claro que sus opciones seguían intactas.

En el reinicio, antes de llegar al minuto diez de juego, se vería la mejor jugada de los burgaleses hasta momento. Una tremenda acción de ataque colectivo que comenzó en campo propio y que terminó en el costado opuesto con Masuyama entrando en la línea de ensayo pegado a la cal y sin nadie cerca. Carrió tampoco falló y colocó el 28-16.

Pero no hay duda de que el Complutense Cisneros es un rival de altura y poco más tarde Irusta dejaba un enorme detalle de calidad con un precioso autopase para salvar la última línea local y hacer un ensayo que lo colcía a ajustar todo casi a la mínima tras la ejecución de Xabi González.

El partido entraba en su fase más tensa y ajustada, con las asistencias entrando al campo, hasta que superada la hora de juego los madrileños daban un golpe en la mesa con un puntapie de castigo transformado por Xabi González (28-26).

De ahí al final el enfrentamiento fue tremendamente vistoso y aguerrido pues cualquier cosa pudo suceder, pero finalmente gracias a un error visitante la moneda cayó de lado local con un ensayo de Bay y ya con el equipo madrileño arriesgando con todo Iñaki Mateu sentenció en los instantes finales.