El Mirandés vence y se aúpa a los puestos de ascenso directo

Tuvo que sudar, pero consiguió el objetivo. El Mirandés sumó los tres puntos que, además, le colocan en segunda posición después que el Sporting de Gijón pinchara en Riazor. No fue un partido fácil para los de Alessio Lisci, que tuvieron que picar piedra para doblegar a un rival muy combativo y que nunca se rindió. Alberto Reina rompió la muralla alicantina en la segunda mitad.

Los mirandeses saltaron al campo con ganas. Sin embargo, Iván Chapela puso el primer aviso de las intenciones de un Eldense que afrontó el partido con descaro. Su disparo se marchó por encima la portería de Raúl Fernández (3’). Los de Dani Ponz presionaban muy arriba intentando sorprender y generar ocasiones de peligro. Un remate de Nacho Monsalve tras un lanzamiento de córner fue una nueva opción visitante (7’).

El Mirandés no tenía el balón en los primeros compases del partido, pero se mantenía calmado esperando su momento. El Eldense continuaba a lo suyo, y un centro de Iván Martos con un remate de Unai Ropero dentro del área no fue gol por poco, ya que el balón se marchó por encima del larguero (14’).

A los veinte minutos, Izeta probó el primer disparo de los rojillos con un tiro lejano que Ian Mackay detuvo sin excesivos problemas. La respuesta azulada fue un zapatazo de Nacho Quintana que se marchó por encima de la portería (23’). Luego, fue el turno de David Timor en un lanzamiento de falta del centrocampista del conjunto alicantino (29’). Y transcurrida la primera media hora de juego, Raúl Fernández evitó un nuevo susto en un balón suelto dentro del área.

Ya en la recta final, el Mirandés dispuso de su mejor oportunidad hasta el momento cuando un centro raso de Julio Alonso acabó con un remate de Lachuer, aunque el balón se marchó pagado al palo. Y es que el conjunto de Alessio Lisci se animó en los últimos compases del periodo. Sin embargo, el marcador se mantuvo inalterable.

Tras el paso por los vestuarios, el primero en crear peligro fue Hugo Rincón con un gran disparo que puso prueba los reflejos de Ian Mackay (46’). Luego, fue el turno de un activo Iván Chapela, aunque el balón no encontró los tres palos de la portería local. Poco a poco, el Mirandés se fue arriba y buscaron crear peligro ante el meta alicantino.

A los 55 minutos, Unai Egiluz tuvo que retirarse del terreno de juego por molestias físicas. El joven central fue substituido por Tachi. Dani Ponz también movió el banquillo viendo que su equipo no respondía como en la primera mitad.

Izeta estuvo a punto de inaugurar el marcador cuando controló un balón dentro del área, pero su remate se marchó fuera. Los jabatos empezaban a avisar con fuerza. Luego, en el minuto 67, la defensa del Eldense estuvo providencial en un saque de esquina para los rojillos que lograron despejar con contundencia. El Mirandés apretaba.

Y tanto fue el cántaro a la fuente, que se rompió. Alberto Reina aprovechó un balón suelto dentro del área visitante, tras un balón rechazado por la zaga, para batir a Ian Mackay. Era el 1-0. Un tanto muy celebrado por la parroquia burgalesa, ya que en ese momento se colocaba segundo en la clasificación.

Un gol que animó al Mirandés. Panichelli estuvo cerca del segundo tanto, aunque el esférico se marchó al lateral de la red (73’). Sin lugar a dudas fueron los mejores minutos para un equipo local que imprimió dos velocidades más en busca de la sentencia definitiva. Panichelli y Hugo Rincón les faltó acierto para conseguirlo. Mientras, el Eldense apenas respondía.

Los últimos coletazos del enfrentamiento fueron de un conjunto alicantino falto de pólvora, pero atrevido en sus acciones de ataque. En tiempo de añadido, Iván Chapela tuvo el empate en sus botas cuando se encontraba solo tras un centro al segundo palo. Le faltó puntería. El Mirandés supo conservar su mínima renta y acabó soplando después que el colegiado diera por finalizado el partido.