Triunfo contundente del San Pablo en el Coliseum para consolidar su liderato

Victoria clara y contundente del San Pablo Burgos para abrir el año. Los de Bruno Costa fueron muy superiores a un Cartagena que puso mucha voluntad, pero nada pudo hacer ante el actual colíder. Corbalán, Cuevas y Díez lideraron a un equipo superlativo que no se dejó sorprender. Los azulados dominaron el rebote y el tiro.

El Cartagena sorprendió a su rival en el arranque del partido con un 2-6 a su favor gracias a un gran acierto en ataque y una defensa que ahogaba la faceta ofensiva burgalesa. Sin embargo, rápidamente el San Pablo Burgos se puso el mono de trabajo y un parcial de 13-5 le dio la vuelta al marcador en el ecuador del primer cuarto (15-11). 

Los triples del letón Stumbris estaban siendo letales. Un nuevo triple de Gudmundsson dejó el marcador en un 22-13 lo que precipitó un tiempo muerto de Jordi Juste, descontento con lo que estaba viendo.

No consiguió nada, y los castellanos remataron la faena (30-17). Aún hubo tiempo para un pedazo de triple de Gil que sellaba el 30-20 al final de los primeros diez minutos de juego. 

De momento, el base islandés Gudmundsson y Corbalán estaban siendo los máximos anotadores locales con seis puntos cada uno. Los locales, además, se mostraban muy acertados en el tiro lejano (8/13 en triples) y dominaban el rebote.

El Cartagena aguanta

Ya en el segundo cuarto, los rojillos empezaron igual como en el primer cuarto. Con un parcial de 2-7, el equipo de Jordi Juste reducía distancias (32-27). Dani Díez puso las cosas en su sitio con un triple (39-29). 

Sin un triple de Rogers (42-34) puso nervioso a Bruno Costa, que pidió un tiempo muerto. Y es que el Cartagena mantenía el pulso al líder. El enfrentamiento estaba siendo muy dinámico sin que el ritmo se rompiera con las interrupciones.

El escolta Jordà apretó más el luminoso con un nuevo triple (42-37). El pulso visitante se mantuvo (49-45) ante un San Pablo de Burgos nada cómodo en la pista. Dídac Cuevas, con un triple, solucionó la papeleta (52-45). Hasta el momento, el San Pablo de Burgos dominaba el rebote y estaba más acertado en el tiro.

Tras el descanso, el San Pablo aceleró la marcha

Tras el paso por los vestuarios, dos tiros libres anotados por Goloman estrenó el marcador en el último cuarto. Un 8-0 de salida puso el 60-45. Parecía que flojeaba el Cartagena, pero un triple de Hermanson despertó a los visitantes (60-48). Fue un espejismo ya que los azulados mantuvieron su ventaja (65-52) a seis minutos para la conclusión del periodo.

Se pasó por el minuto 25 con 65-55. Fue entonces cuando apareció la mejor versión del San Pablo de Burgos y un parcial de 8-0 amplió la ventaja local a 15 puntos (73-55). Volvía la tranquilidad a las filas castellanas. 

De ahí hasta la conclusión del tercer cuarto, se mantuvo hasta el final (89-70). Hasta el momento, Corbalán estaba siendo el máxima anotador con 15 puntos, bien secundado con Cuevas (14).

Los locales empezaron con un 4-0 (93-70), que rápidamente su rival neutralizó (93-74). Sin embargo, la reacción rojilla no llegó y Lapornik firmó el centenar de puntos para su equipo (100-74). Los de Bruno Costa controlaban perfectamente el partido y en el minuto 35 ganaban 102-76.

El enfrentamiento estaba sentenciado a no ser de una reacción brutal de los cartageneros, pero parecían resignados a su final. De nada sirvió el tiempo muerto de Jordi Justo ante el vendaval ofensivo y la exhibición burgalesa en los últimos cinco minutos. 

Un triple de Cuevas y otro de Corbalán firmaron el 112-84 a menos de dos minutos para la conclusión. El numeroso público que se acercó al Coliseum disfrutó mucho.