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FÚTBOL / Tercera División. Grupo VIII

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El Burgos CF se impuso al Salmantino en un partido en el que comenzó perdiendo

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BURGOS CF    3

SALMANTINO    1

Burgos CF: Aurreko, Urbano, David, Colina, Nené, Txitxo (Núñez, min. 85), Maureta, Borja (Óscar, min. 92), Lezaun (Espinosa, min. 55), Nel y Zazu.Salmantino: Mario, Darío, Edile (Sergio, min. 78), Carabias, José Ángel, Trujillo (Naya, min. 78), Carmona, Bernal, Manu, Chopo y Eli (Juanfran, min. 55).Árbitro: Franco Galván (colegio palentino). Mostró tarjeta amarilla a los locales Colina y David, así como a los visitantes José Ángel, Trujillo y Carmona.Goles: 0-1, min. 13: Chopi. 1-1, min. 38: Zazu. 2-1, min. 52: Borja. 3-1, min. 73: Zazu.R. MENA / Burgos

El Burgos CF sumó una nueva victoria liguera ante un rival inferior que supo aprovechar una de sus escasas ocasiones, pero que acabó hincando la rodilla ante el mayor potencial blanquinegro. Los de casa volvieron a ganar sin excesivo brillo, aunque es cierto que fueron los claros dominadores del partido y gozaron de numerosas ocasiones de gol. El equipo ganó porque simplemente era superior al Salmantino, un equipo plagado de jugadores jóvenes que mostraron buenas maneras, pero muy blandito y que en el cuerpo a cuerpo estuvo en clara inferioridad con los locales. El filial charro hizo lo que tenía que hacer: aprovechó un error burgalés para meter el miedo en el cuerpo a la parroquia local y posteriormente trató de administrar su ventaja haciendo de las contras su principal arma ofensiva. No le sirvió de nada, aunque su entrenador acabó satisfecho tras lo ofrecido por los suyos.

Y es que la ley de la selva fue implacable y el pez grande se volvió a comer al chico. No por nada en especial, sino porque generalmente suele suceder así. Aunque el Burgos sigue sin transmitir sensaciones realmente positivas. Álvarez de los Mozos continúa viendo el vaso medio lleno, aunque a su equipo en varias fases del partido le falto frescura e ideas. Pese a que suene redundante, este no es el Burgos de la pasada campaña. No muerde como lo hacía hace un año, ni juega con la misma intensidad. Y eso es un problema cuando es un conjunto creado precisamente para sobresalir en estos aspectos.

Es verdad que los jugadores siguen trabajando a destajo durante los 90 minutos, pero les falta ese punto que en el anterior curso sacaba de rueda a sus rivales. El ritmo ha descendido y el balón lo recuperan varios metros más atrás de lo que lo hacían la anterior temporada, lo que supone una dificultad más.

Aunque la jornada le salió redonda a los burgalesistas y es que han recuperado la segunda plaza tras el tropiezo de la Arandina ante el colista y además le han recortado dos puntos al Real Valladolid B, que empató con el Villaralbo. No obstante, ni el cuerpo técnico ni la plantilla evitan destacar lo anterior, ya que tampoco se llevaron las manos a la cabeza cuando ocurrió lo contrario.

El Burgos remontó un partido que se le puso cuesta arriba debido a un error en cadena que comenzó con una falta a favor mal botada y que concluyó con un falló defensivo que puso en bandeja el 0-1.

Fue entonces cuando llegaron los nervios, cuando la grada comenzó con el murmullo y los gritos en contra del entrenador. Pese a todo parecía poco probable que el Salmantino se pudiera llevar los tres puntos de El Plantío y en la segunda parte el guión recuperó su lógica y todo quedó en un susto.

Borja demostró que en estos momentos es la mejor alternativa en la banda derecha. Fue el mejor del partido y puso en bandeja el empate y posteriormente materializó el 2-1. Zazu marcó por partida doble y, pese a que no estuvo excesivamente fino en el juego, sigue engordando sus estadísticas.

Todo comenzó como se esperaba y es que el Burgos se hizo con el control del choque desde el pitido inicial. El Salmantino se empecinaba en sacar el balón jugado desde atrás, lo que provocó las primeras ocasiones locales. Era el partido soñado por los blanquinegros. Tenían enfrente un rival ‘blandito’ que sufría en el cuerpo a cuerpo, ya que físicamente estaba en clara inferioridad con respecto a los de casa.

Pero el guión sufrió un giro inesperado en el minuto 13 de partido. En un golpe franco cercano a la línea del centro del campo, el Burgos optó por buscar a Borja en la frontal en lugar de colgarlo al área. El vallisoletano perdió el balón y el Salmantino salió en estampida. Carmona cambió el juego a la banda izquierda una vez superada la línea divisoria, la defensa burgalesa erró en la cobertura y Chopi controló en el área y batió con relativa facilidad a Aurreko.

El choque se complicaba y lo peor de todo es que el cuadro visitante se había despojado del temor con el que comenzó el partido y se mostraba con mayor desparpajo. Al conjunto local no le quedaba otra que seguir de la misma forma, llevar el partido al terreno físico y confiar en que su fortaleza hiciera mella en la endeblez charra.

La banda derecha seguía siendo el camino más fiable para hacer daño al Salmantino. Las ocasiones comenzaron a llegar, aunque se volvió a demostrar que el punto de mira burgalesista sigue desviado. De esta forma, Txitxo, dentro del área, no acertó en el 24 tras un buen servicio de Borja. Poco después Nel se entretuvo demasiado cuando estaba en una posición inmejorable para marcar, mientras que a Borja le volvió a fallar la definición en el 37 cuando regateó a su par en el área.

Llega el empate

En la siguiente jugada, que también llegó por el carril diestro, subió el empate al marcador. Una buena combinación blanquinegra acabó con un pase en profundidad de Nel para Borja, que hizo el pase de la muerte para que Zazu rematara a puerta vacía. Ya llovía menos, pero sólo se había dado el primer paso hacia la remontada. Al descenso se llegó con este resultado y si nada se torcía el Burgos tenía tiempo suficiente para darle la vuelta a la tortilla.

Los blanquinegros saltaron muy ‘enchufados’ en la reanudación y el acoso a la meta de Mario fue constante. En el 48 Lezaun no pudo evitar al portero salmantino tras un buen pase de Zazu, mientras que 3 minutos después el delantero navarro tampoco acertó en otra buena oportunidad de gol.

Tuvo que ser Borja en el 52 el que  volteara la situación en un saque de esquina. El rechace le llegó al pucelano en el segundo palo y con un disparo certero cruzó el balón e hizo el 2-1. Lo más complicado estaba conseguido y parecía imposible que el partido se le pudiera escapar al Burgos CF, más cuando su rival se iba apagando con el paso de los minutos y no encontraba la fórmula para hacer frente a su juego.

La salida de Espinosa dio mayor dinamismo al ataque burgalés, pero el delantero blanquinegro no tuvo ayer su día más acertado y desaprovechó dos buenas ocasiones antes de que llegara el 3-1. Volvió a ser en un saque de esquina y en esta ocasión fue Zazu quien de cabeza envió el balón al fondo de las mallas tras la salida en falso del guardameta visitante.

Las cosas estaban ya en su sitio y el Burgos CF tuvo ocasiones para aumentar su renta antes de que llegara el final, aunque el marcador ya no se volvió a mover y el 3-1 fue definitivo.

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