Una derrota muy peleada para el Burgos CF

El Burgos CF regresa de vacío en su primera salida tras un partido de locos. Dos equipos en plena reconstrucción con el mercado hirviendo disputaron un espectacular encuentro, con ocasiones de todos los colores, con el VAR a pleno rendimiento, con casi 25 minutos de añadido entre los dos periodos (por favor, estúdiese el tema) y con un equipo de Bolo al que le faltó oficio atrás para llevarse algo positivo. 

Fue un derroche de juego ofensivo de Levante y Burgos, con un añadido del primer periodo con tres dianas en seis minutos (del 0-1 al 2-1, ay, ese oficio atrás) y con una escuadra castellana que dio la cara en todo momento pero que tuvo que conformarse con ese amargo tres a dos final.

Inicio eléctrico del Levante, con oportunidad para Lozano al medio minuto que la defensa pudo sacar a córner tras una llegada granota por la izquierda, con respuesta burgalesa por la vía rápida en un cabezazo de Fer Niño con muy poco ángulo en el segundo palo, y que sacó con apuros el meta local Femenías.

Idearios similares en el 4-4-2 y mazazo a priori antes de los ocho minutos, cuando caía en el área burgalesista Sergio Lozano ante el arrastre en la marca de Grego Sierra. Hubo contacto, hubo exageración del local, para Guzmán hubo penalti, pero lo que no hubo fue gol ya que el tiro de Cantero, pese a engañar a ´Churripi´, se estampó en el poste.

Dominaba más el Levante y pasado el cuarto de hora, el zapatazo tremendo del joven canterano local Andrés García lo sacaba con seguridad Caro con los puños en otra llegada granota. 

El partido estaba en manos del Levante, al Burgos la pelota le duraba un suspiro y otra combinación del ataque levantinista la cabeceaba Bouldini fuera, en pleno agobio para los de Bolo.

Pero a pelota parada las fuerzas se igualan, y una falta lejana la puso Curro con arte y peligro en la testa de Elgezabal, cuyo cabezazo a bocajarro se escapaba por encima del travesaño. Igualaba con paciencia el cuadro castellano la posesión en la zona ancha y el partido estaba entretenido de lado a lado.

Tras la hidratación, Álex Muñoz la tuvo en un trallazo raso al que Caro respondía con seguridad. El meta volvía a sacar a los 38 un gran disparo de Andrés con la izquierda desde el perfil diestro, a pie cambiado.

Volvía a acosar el Levante y Caro era providencial poco después en el mano a mano ante Cantero, aún deshilvanado por marrar el penalti, después de un grosero error de Grego Sierra en el pase. El meta burgalesista, de larguísmo, era el mejor de los suyos.

En un chispazo visitante a los 43 minutos la tuvo Curro tras una llegada vertical y con clase, pero su trallazo raso se perdía muy cerca del poste en una opción que no sería sino el preludio del cero a uno. Fer Niño se llevaba un balón largo con el Levante pidiendo falta del ariete, y su centro al segundo intento y buscando el segundo palo lo enganchaba allí Edu Espiau de primeras, gran volea y golazo para el cero a uno. El VAR dictaminó que era válido el tanto.

Pero la alegría duró un suspiro, ya que Cantero recibió en el área y puso un balón pegadito al palo imposible para Caro, Suspiros de alivio granotas al igualar en el tercer minuto de añadido. 

Gol anulado y luego confirmado

En plena locura, antes del asueto se le anulaba un gol a Sergio Lozano, que pudo suponer el 2-1, por un fuera de juego muy dudoso de Bouldini, caído en el área. Tanto fue así que Guzmán Mansilla fue a la pantalla tras la indicación de la sala VOR y acabó rectificando, gol y remontada granota ante las quejas de Bolo y los suyos. Una locura de primer periodo con final amargo para los castellanos.

Edu Espiau tenía la primera en la reanudación con un testarazo centrado a los guantes de Femenías. Pisaba campo adversario el once de Jon Pérez, muy ambicioso, pero los minutos iban pasando y el encuentro se aplanaba, muy diferente a ese final del primer acto. 

Elgezabal cabeceaba alto en otra jugada de estrategia, y tras un doble cambio de Bolo, el mazazo del 3-1 en una hermosa combinación granota, pase largo de Oriol Rey, toque de Cantero y control y volea de Bouldini a las mallas desde la altura del punto de penalti. Una hermosa diana que complicaba los planes del Burgos.

Pedían penalti los visitantes en el ecuador, tras una jugada donde Femenías sacaba con una manopla milagrosa y después Valle salvaba tirándose con todo el 3-2 de Espiau en el remate a bocajarro del 19 burgalesista en una jugada eléctrica. Y después de varias sustituciones por bando y bando, ya casi con todo olvidado, Guzmán iba a la pantalla avisado por el VAR y el derribo a Fer Niño, que ya no estaba en el campo, era penalti. 

Un partido repleto de incidencias, qué duda cabe. Curro Sánchez, con calma, puso en la misma escuadra la pena máxima y había partido, 3-2 a veinte del noventa.

Final frenético

No cejaba en su empeño el Burgos, y un cabezazo de Elgezabal, lejano pero potente a centro de Borja, lo sacaba Femenías en plástica estirada al paso por el 80 de juego. El partido estaba ya muy roto pero, a pesar de los diez cambios realizados, a estas alturas de temporada faltaba ya mucho oxígeno en las piernas y los errores eran la tónica.

En un par de contras pudo machacar el Levante con el cuarto gol, y en un añadido nuevamente eterno, el cabezazo de Espiau se marchaba por encima del travesaño en una de las últimas del Burgos. A los 102 minutos de juego una falta puesta por Curro la sacaba con apuros el meta local, muriendo en la orilla un Burgos que necesita mejorar de medio campo hacia atrás. 

Tras un total de 114 minutos de partido, casi una prórroga con esos añadidos de locura, la primera derrota pero las buenas sensaciones con balón son dos realidades desde la óptica de El Plantío.