'Operación Topolino'
La Fiscalía Anticorrupción pide prisión sin fianza para el dueño de Vitaldent
La acusación pública solicita la misma medida para otros tres directivos que han declarado también este miércoles
La Fiscalía Anticorrupción ha pedido prisión provisional sin fianza para el dueño de Vitaldent, Ernesto Colman, y otros tres detenidos que han pasado este miércoles a disposición del juzgado de Instrucción número 2 de Majadahonda (Madrid) tras ser arrestados en el marco de la 'operación Topolino' contra el fraude fiscal y el blanqueo de capitales, según han informado fuentes jurídicas.El Ministerio Público ha solicitado esta medida cautelar para Ernesto Colman; el vicepresidente de la compañía, Bartolo Conte, Javier Artega y Nicolás Sisinni, que han sido los primeros de los 13 detenidos a los que la magistrada ha tomado declaración en el marco de la causa iniciada a raíz de la denuncia de varios de los franquiciados.La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional desplegó este martes la operación ante la sospecha de que el propietario de la cadena especializada en salud dental estaba exigiendo a sus franquiciados que le pagasen el 10% de lo acordado en metálico. Los investigadores cifran el fraude en torno a los 10 millones de euros. RESPONSABLE DE LA EXPANSIÓNEntre los detenidos en Madrid y en Torrevieja (Alicante), se encuentra también Vicente Samper, director comercial de Vitaldent desde 2005 hasta hace tan solo unas semanas y la persona encargada de la expansión de Vitaldent tanto en España como en Portugal, Italia o EE.UU. En el marco de esta operación, la Policía ha incautado un avión, decenas de coches y varios de alta gama.Según estas investigaciones, los arrestados formaban parte de ungrupo organizado creado dentro de la estructura empresarial, diseñado para eludir el pago de impuestos a la Hacienda Pública, según la Policía. La Fiscalía, en un comunicado emitido este martes, habla incluso de "organización criminal" dirigida por el dueño de Vitaldent, Ernesto Colman.El procedimiento que seguía la trama era desviar el dinero que recibían en metálico fuera de España, concretamente a Suiza yLuxemburgo. Luego ese dinero se reinvertía de nuevo en España. Se hacían con artículos de lujo, o creaban nuevos negocios, según los investigadores.