Alonso entrega su acta de concejal pero no descarta volver a la política

La salida de Roberto Alonso de la corporación municipal es ya una realidad, después de que ayer entregara su acta de concejal. Llegó a la rueda de prensa con corbata magenta, hecho que puede resultar extraño y que, el hasta el momento líder de UPyD en el Ayuntamiento de Burgos, explicó asegurando que «aunque sólo sea con la corbata manifiesto que no me voy del partido sino que me echan, porque creo en los principios que simboliza el color magenta».

Alonso aseguró que esta acción tiene un objetivo claro, «permitir que UPyD siga conformándose como grupo municipal». Un hecho que calificó de «muy generoso» y que «sacia la ambición política del nuevo coordinador local, Mario Díez y de Rosario Pérez».

Y es que, mientras que la tercera en discordia, la concejal de UPyD, Rosario Pérez, atribuía la salida de Alonso y de Julián Altable a la amistad que une al primero con José María Arribas Moral, imputado por UPyD por su gestión en Caja de Burgos, Alonso seguía manteniendo que su marcha se debe «a falta de transigencia del partido al impedir mantener a Julián Altable como número 3 para las próximas elecciones».

En cuanto a Arribas, Alonso aseguró que «es una barbaridad» vincular su marcha con él ya que hace 11 años que mantiene «una relación de encuentros ocasionales en actos públicos», pero eso sí, el exconcejal no dudó en calificarle como «el mejor presidente de FAE y de Caja de Burgos a expensas de lo que haya cometido, que de eso, los Juzgados dirán».

Asimismo, el antes ’unionista’ dejaba claro que su decisión es un regalo porque «los votos que consiguió UPyD en 2011 son en su mayoría míos y de Julián» y «entiendo que me pertenecen, ya que los ciudadanos votaron a mi persona».

Además de con Díez, Alonso fue especialmente crítico con Rosario Pérez, a quien achacó «declaraciones vergonzosas por las mentiras que esconden». «Lo único que intenta es ocultar los motivos reales por los que nos fuimos y me sorprende que haya sido después de pedirnos vehementemente que no nos marcháramos», aseguró.

Por su parte, Julián Altable no entrega el acta y es que considera que con dicha acción «estaría dando la razón a quienes le han vilipendiado y ninguneado» y aseguró que seguirá manteniendo «una postura dialogante con el nuevo grupo de UPyD». Asimismo, Altable aseguró que «impugnará la comisión de cultura celebrada el miércoles porque «fui privado de ejercer mi derecho al voto».

futuro político

Alonso, sin embargo, aseguró a tenor de la situación tensa vivida en las comisiones del pasado miércoles que «no merece la pena» pero no cerró las puertas a un futuro político. «Me voy a mi vida privada peor no descarto volver».

Un partido ya se ha puesto en contacto con él, Ciudadanos de Burgos, de Lesmes Peña, «que nada tiene que ver con Ciudadanos». Sea como fuere, Alonso marcó como condición sino que non, que donde vaya «será de la mano de Julián, si quiere él, donde vaya yo tiene que estar él». En este sentido, añadió que «está por olvidarse de todos los partidos políticos» y que le «sale de las tripas hacer un partido de la sociedad cilvil burgalesa aunque al final recojamos sólo los votos que podamos tener Julián y yo» pero aseguró que «iniciará contactos con Lesmes Peña para conocer qué hay y cómo está aunque ahora ese partido es una jaula de grillos».