«Un alcalde debería demostrar una buena gestión en su vida profesional»

Progresa Burgos representa para Roberto Alonso la libertad que deseaba en política para ponerse al servicio de los burgaleses. Asegura que después de su salida de UPyD pensó durante 24 horas si seguir o regresar a sus proyectos personales. Tras estas horas de reflexión se apuntó a la aventura de crear una nueva formación ya que asegura que, ahora mismo, su vocación es la política.

Pregunta.- ¿Cómo se define Progresa Burgos, qué ofrece de diferente con respecto al resto de opciones que concurren a las municipales?

Respuesta.- Nos caracteriza algo distinto y es que somos el único partido genuinamente local que se va a presentar a las elecciones. Es muy positivo para la ciudad que haya un partido libre de las ataduras de los partidos nacionales que en demasiadas ocasiones marcan las líneas a seguir en los municipios, sin considerar las peculiaridades de cada territorio. Nosotros vamos a ser libres para reivindicar lo que Valladolid nos ha quitado y con ello ha frenado nuestro desarrollo económico. Es claro que cuando en el Gobierno municipal, en el regional y en el nacional gobierna el mismo partido, como ha sido el caso del PP, las reivindicaciones se amortizan y hay que ser servil al partido en el que se está. Progresa Burgos no va a tener esas ataduras.

P.- Viene de UPyD, que es un partido nacional, ¿no se ha sentido libre en esta formación?

R.- Pues yo adquirí un compromiso de que el grupo municipal iba a tener libertad de actuación y la verdad es que, al final, sí tuvimos que compaginar nuestro criterio con el del partido que no siempre ha sido coincidente como por ejemplo en la defensa del aeropuerto de Burgos que nosotros dijimos, en contra del criterio de UPyD de cerrar todos los aeropuertos de España que no fueran rentables. Esto nos ocasionó una reprimenda desde Madrid. A partir de ahí, creo que ahora Julián Altable y yo tenemos la libertad completa de defender aquello que consideremos importante para Burgos, siempre por Burgos y trabajando para Burgos. La libertad como partido local es total.

P.- ¿Cómo está viendo y viviendo la crisis de UPyD en los distintos ámbitos?

R.- Me da pena porque yo creía en los principios de UPyD. Tienen un gran programa y un gran problema: su líder, Rosa Díez, no ha sabido escuchar lo que le decía la ciudadanía y algunos miembros del partido sobre hacer un acuerdo con Ciudadanos para lograr un gran partido nacional y una alternativa. Ella ha priorizado mantener el chiringuito de su partido y la ciudadanía no se lo está perdonando y creo que van a fracasar en las elecciones. Si esto es así, corren el peligro de disolverse como un azucarrillo en un café y acabar como el CDS.

P.- ¿Qué Burgos quiere Roberto Alonso y Progresa Burgos?

R.- Un Burgos fundamentalmente en el que se trabaje por el progreso económico y social de la ciudad, a través de poner en marcha todas las herramientas necesarias para la creación de puestos de trabajo. Las herramientas son vender, hacer marketing de Burgos como la ciudad ideal para alojar empresas, poner las condiciones fiscales más apropiadas para que esto sea una realidad, el abaratamiento del terreno industrial, poner en valor las empresas multinacionales importantes que aloja Burgos y que sean ellas las que también sean vendedoras de la marca Burgos. Nosotros somos capaces de hacerlo porque tenemos experiencia. En mi etapa de presidente de FAE, me he distinguido por ser reivindicativo con los poderes públicos, con el Gobierno regional y nacional por la búsqueda de este desarrollo económico y social a través de la venta de la marca Burgos como terreno industrial ideal.

P.- Todos los partidos hablan de que la creación de empleo está en sus prioridades, pero ¿cuál es la fórmula, qué pueden hacer los políticos?

R.- Somos conscientes de que desde la política municipal, las acciones son limitadas y son las políticas regionales y nacionales las que marcan el desarrollo del empleo. Creo que desde el municipio hay acciones a llevar a cabo y pienso que desde mi experiencia de presidente de FAE, de relación con el mundo empresarial, tengo un plus, sobre el resto de cabezas de lista de otros partidos. También entiendo que un alcalde tiene que ser libre de las ataduras partidistas para defender lo que necesita Burgos. Hay que elegir un alcalde que haya demostrado ser gestor en su vida profesional y creo que eso yo puedo demostrarlo. Un alcalde sin falsa humildad que haya ido por la vida con valores de trabajo, honestidad y sensibilidad social. Creo que puedo ser un buen alcalde y deseo ser alcalde.

P.- Ha echado en falta que durante estos años se haya hecho más por la promoción industrial de Burgos...

R.- En esta legislatura hemos perdido al menos tres años, quizá en el último se haya hecho algún esfuerzo, pero sin la asignación económica suficiente para hacer una buena acción de marketing en España y en Europa.

P.- ¿En qué otros ámbitos cree que se han perdido estos cuatro años con el actual equipo de Gobierno?

R.- Creo que no ha habido participación ciudadana, no se ha escuchado a los vecinos, se ha gestionado con improvisación. Han practicado el baile de la ‘Yenca’, un paso para adelante y otro para atrás. En aspectos sociales, habiendo dinero, porque ha habido superávit en los dos últimos ejercicios, se ha sido muy rácano con las demandas que se reclamaban en una situación de crisis. En definitiva, creo que ha sido un muy mal gobierno municipal, muy mejorable.

P.- Con respecto al desarrollo económico de Burgos, ¿cree que se ha sido lo suficientemente reivindicativo con la Junta?

R.- Desde luego que no se ha sido lo suficientemente reivindicativo. Es inexplicable la historia de nuestro parque tecnológico, de los años que lleva parado cuando otros que han salido a la vez, llevan ya años creando empleo y alojando empresas como el de León. Mientras el de Boecillo, en Valladolid, ha visto ampliaciones y luego se apuesta por un parque de proveedores que no se sitúa en Burgos. No es provincianismo decir que Valladolid está chupando la sangre de Burgos, es una realidad y se puede contrastar con datos. Y entre otras cosas que nos diga el consejero, Tomás Villanueva, qué empresas que se hayan dirigido a su departamento las ha redirigido hacia Burgos. Cero patatero. Cuando decimos que desde Valladolid no se ha trabajado por el desarrollo económico y la implantación de empresas, se puede contrastar con datos...

P.- Ponga algún ejemplo

R.- Han ido empresas burgalesas y les han animado a ir a Valladolid donde había incentivos. Prefiero no dar los nombres, pero esto ha ocurrido.

P.- En materia social, ¿cuáles serían las líneas de Progresa Burgos?

R.- En el tema social tenemos que tener especial sensibilidad en estos momentos de crisis con aquellas familias con todos sus miembros en paro y, por tanto, debemos exonerarles de impuestos municipales. Sensibilidad con aquellos que van a perder su vivienda y, en ese sentido, promovemos un acuerdo con las entidades bancarias de manera que seamos prestamistas hacia el que le van a desalojar de su casa durante un año de las cuotas que tiene que pagar por intereses y amortización. Ese préstamo debería ser devuelto en el plazo de cinco años por los beneficiarios con interés cero.

P.- Va a ser una campaña complicada, mucha competencia, muchos partidos nuevos, entre ellos el suyo... ¿Cómo lo ve?

R.- Está todo muy abierto, la presencia de VOX, Imagina Burgos, Ciudadanos y Progresa Burgos supone un cambio muy importante con respecto a las elecciones de 2011. Es posible que las encuestas no acierten. Por nuestra parte, la campaña va a ser limpia, hablaremos de lo que hemos visto mal en la legislatura anterior... No iremos a dar patadas en las espinillas, en este juego que suponen las campañas electorales.

P.- En este abanico tan amplio de partidos, cómo se define Progresa Burgos con respecto a quién quiere representar... Son políticas de izquierdas, de derechas, de centro...

R.- Nos definimos como un partido liberal, de centro, con raíces profundas del humanismo cristiano que impera en Europa.

P.- ¿Está más ilusionado que hace cuatro años, con su propio proyecto político?

R.- Creo que me mueve la misma ilusión, la de poder aportar lo mejor de mí mismo y de nuestro proyecto al desarrollo de Burgos. Quizá con un plus de la gran aventura que supone crear un partido nuevo en dos meses. Tarea dura sobre todo en el aspecto de encontrar a las personas que se han unido al proyecto, que al final ha sido más fácil de lo que pensaba en un inicio.

P.- ¿No se planteó rendirse y decir hasta aquí en política, me vuelvo a mis proyectos personales?

R.- Quizá estuve 24 horas pensándolo, tan solo 24 horas. Ya había hecho un compromiso con UPyD en noviembre cuando se me eligió en primarias, pensaba seguir cuatro años. La negativa del partido a que el cabeza de lista pudiera aportar algo a la candidatura, se me imponían las personas, perder la libertad... Y si algo amo como valor en la vida es la libertad. Por ello, en 24 horas decidí que nadie me echaba y que no debo quedarme al margen de la vida municipal, es mi vocación en este momento.

P.- Siempre se dice que en las municipales se vota más a la persona que al partido. ¿Roberto Alonso va a ser capaz de arrastrar esos votos que se fueron a UPyD en 2011 y sumar otros nuevos?

R.- Yo estoy convencido de que sí, pero no será hasta cuando se abran las urnas, cuando lo sepamos. Yo creo que los buenos resultados de UPyD que en Burgos fueron de los mejores de España en las pasadas elecciones, fue por llevar a Roberto Alonso y a Julián Altable en sus puestos de salida. Esto lo ha perdido UPyD y nosotros lo conservamos. Sí que es verdad que la historia se lo ha puesto difícil a los partidos locales, pero ahí estuvo el de José María Peña.

P.- ¿Qué opina de los cabeza de lista del resto de formaciones?

R.- Abunda la juventud en algunos partidos como UPyD, Imagina Burgos y el Partido Socialista, en otros menos como Ciudadanos, PP y Progresa Burgos. Todos me merecen el máximo respeto, pero muchos no tienen demostrada ninguna experiencia de gestión porque algunos lo único que han gestionado es estar en política. Otros llegamos con una experiencia de vida y de gestión en otros aspectos.