El Correo de Burgos

HIPERBARIC CHALLENGE, LA CARRERA

Prohibido frenar

45 coches, ocho dentro de la competición de centros educativos, participaron en la carrera

El trayecto arrancaba en el alto del castillo, bajaba hacia el empedrado de San Esteban para girar por la calle Trinas hasta alcanzar la zona de Capitanía.-R.G.O.

El trayecto arrancaba en el alto del castillo, bajaba hacia el empedrado de San Esteban para girar por la calle Trinas hasta alcanzar la zona de Capitanía.-R.G.O.

Burgos

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Tras un año de trabajo 12 alumnos apasionados por el motor y que han trabajado en desarrollar un coche de inercia modelo C4 lo tenían claro: prohibido frenar... hasta que no haya más remedio. Tras la primera jornada de presentación de proyecto ante el jurado, realizado el pasado viernes, llegó el momento de poner en práctica la teoría de la inercia. La competición de coches sin motor de Hiperbaric Challenge contó con 12 pilotos de proyectos elaborados en centros educativos de los colegios Maristas con dos equipos, La Salle, Salesianos Padre Aramburu, con dos vehículos y otros centros de Belorado, Guipúzcoa, Ourense y Vitoria. Junto a ellos bajaban, con intención de no pisar el freno y empujando a la inercia natural de un 12% de pendiente, otros 33 pilotos inscritos en la Federación Española de Deportes de Inercia.El trazado «uno de los mejores», según alguno de estos pilotos profesionales, atrae a pilotos de Galicia, León, País Vasco, Santander o Asturias. Pivaracing Bierzo resultó ganador. Su piloto Iván Marcos García, campeón de España en 2014, era el favorito al iniciar las mangas de entrenamiento durante la mañana. No defraudó el leonés que realizó el trazado de un kilómetro con dos curvas muy pronunciadas al inicio, a la altura del mirador del Castillo, y en el tramo final antes de llegar a Capitanía, y una curva de adoquines rodeando el arco de San Esteban donde todos los coches botaban con fuerza obligando a la mayoría a realizar aquello que tenían prohibido en sus mentes, pisar el freno.Iván García realizó el circuito en un tiempo de 1,20 minutos. Segundo fue su compañero Adrián Álvarez con 1,22 minutos. Dentro de los pilotos escolares, estudiantes de últimos cursos de secundaria, el ganador fue Íker Arizti Nafarrate del centro Urola Garaiko Lanbide Eskola de Zumárraga (Guipúzcoa). Como mejor proyecto valorado por el jurado, el ganador fue Galinercia del colegio C.P.R. Plurilingüe Santa María-Marista Ourense que no tuvo suerte en las mangas de competición que desde las 15.30 horas concentró a curiosos a lo largo del trazado.La gala de entrega de premios se celebró a las 19.00 en el aula magna de la Universidad Internacional Isabel I. Ahora toca empezar a pensar en la próxima edición. Algo que ya aseguran desde Hiperbaric. «Tenemos mucha ilusión y compromiso por continuar y dar apoyo a este proyecto», apuntó el director general de Hiperbaric, Andrés Hernando.

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