El Correo de Burgos

MEDIO AMBIENTE / HUECO VERDE

El emprendimiento más sostenible

El Hueco Verde de Fundación Oxígeno cumple tres años como espacio para el autoempleo comprometido

Vista general de ecoworkers en el Hueco Verde, gestionado por la Fundación Oxígeno.-ISRAEL L. MURILLO

Vista general de ecoworkers en el Hueco Verde, gestionado por la Fundación Oxígeno.-ISRAEL L. MURILLO

Publicado por
M. R.
Burgos

Creado:

Actualizado:

El Hueco Verde ha cumplido ya «tres años y poco», como le gusta decir al responsable de Fundación Oxígeno, Roberto Lozano. Un periodo de tiempo suficiente que le ha permitido convertirse en un espacio de referencia para aquellos emprendedores que quieren poner en marcha, o ya lo han iniciado, proyectos comprometidos con el medio ambiente y la sostenibilidad. O, en palabras de Roberto Lozano, una iniciativa que nace, en primer lugar, de la necesidad de «generar empleo y, por otro lado, la necesidad de seguir trabajando por la preservación del medio ambiente, entendiendo que la mejor manera era generando buenos profesionales que en su trabajo diario sean capaces de influir sobre el medio ambiente de una manera positiva».

Desde que se puso en funcionamiento, ya han pasado 67 ecoworkers, es decir, emprendedores que comparten un espacio de trabajo y, en este caso, con proyectos vinculados a la preservación del medio ambiente. «En principio, todos los proyectos que hay son de emprendimiento ambiental», explica Lozano.«Buenos arquitectos con sensibilidad ambiental podrán trabajar mejor sobre el medio ambiente que si no la tienen. Igual un fontanero que un diseñador gráfico que un ganadero», apunta. En este tiempo ya han cristalizado 47 emprendimientos que abarcan todo tipo de sectores. Hay autoempleos o microempresas de diseño gráfico, arquitectura sostenible, cooperativas energéticas, educadores ambientales, proyectos de ganadería y agricultura ecosostenibles, webs, apps, turismo,... incluso un grupo de folclore.

El Hueco Verde, que linda con el centro penitenciario, dispone de un espacio de 2.000 metros en los que, entre otros recursos, hay 22 puestos para trabajar, dos aulas de formación, así como dos salas de reuniones.

La gran mayoría llegan al HuecoVerde con las ideas muy claras sobre qué quieren hacer, aunque en muchos casos también no saben cuáles son los pasos que deben dar. «Nosotros lo que pretendemos es dar formación, apoyo y mentalización para que pongan en marcha sus proyectos», explica Lozano. La formación es importante.Aunque es cierto que cada vez hay más formación, en Fundación Oxígeno «no queremos solaparnos con otras entidades que dan asesoramiento, sino que tengan un cobijo tanto físico como un apoyo profesional para ayudarles a empujar su proyecto». Una de las ventajas del Hueco Verde es que «les facilitamos que tengan relación entre ellos.Son muchas personas con diferentes proyectos pero con un hilo conductor que es el medio ambiente o un planeta más sostenible, lo que hace que creen entre ellos lazos». Es cierto que muchos llegan con idea de su proyecto grabada a fuego y con la determinación necesaria.Sin embargo, en opinión de Lozano, una cosa es tener formación en emprendimiento y otras muy distinta tener cultura de emprendimiento. «Ahora mismo existe mucha formación en emprendimiento, pero no estamos educados en la escuela o la universidad para generar tu propio negocio o pequeña empresa», asegura.

Muchas grandes ideas se desmoronan cuando se quieren poner en práctica. «Ponerte frente a un proyecto es muy laborioso y muy duro, y no todo el mundo está preparado para hacerlo. En ese trayecto, algunos porque necesitan mucha inversión y otros porque no tienen la capacidad o el impulso», destaca Lozano. Por eso, el primer paso que dan los responsables del Hueco Verde está relacionado con intentar hacer una composición de lugar al emprendedor. «Intentamos centrar las ideas, la motivación y los recursos que esa persona tiene, ayudarle a dimensionar su proyecto para que sea capaz de sacarlo en una primera etapa y no se desilusione y no se cree expectativas muy altas que luego no puede cumplir y le lleve a un fracaso difícil de levantar», explica Lozano.

El Hueco Verde, como no puede ser de otra manera, es un espacio vivo, en el que aprendizaje es constante. De ahí que en estos «tres años y poco» se hayan realizado ya cerca de 60 acciones formativas, más de 200 horas de formación, así como la participación de un centenar de ponentes y mentores y más de 2.000 participantes en las acciones.El proyecto se sostiene gracias al apoyo de Fundación Proyecta, que aporta alrededor de 6.000 euros al año. A ello se suman una docena de entidades colaboradoras.

tracking